Una viuda que se enfrenta a una multa de 2.000 dólares al día encuentra a unos desconocidos arreglando su propiedad

Ago 25, 2021 by apost team

Una viuda se enfrentaba a multas diarias porque un pariente había utilizado su casa para tirar basura y escombros. Su patio tenía una cantidad importante de trastos podridos y oxidados. A lo largo de los años, la gente había tirado la basura allí y utilizado la propiedad de la viuda para almacenar cosas sin darle ningún tipo de compensación. Los demás familiares de la viuda se negaban a ayudarla a retirar la basura.

Los vecinos de la viuda estaban cansados de ver toda la basura en su patio, pero en lugar de ayudarla, se quejaron al ayuntamiento, y los funcionarios municipales se apresuraron a tomar medidas. Desgraciadamente, la viuda fue amenazada con multas de más de 2.000 dólares por cada día que no se limpiara el horrible desorden.

La viuda se llamaba Agnes Maples y, a sus 90 años, estaba desesperada por que alguien viniera a ayudarla. Sus problemas no se limitaban solamente a la basura de su patio. Muchas partes de su casa también estaban totalmente deterioradas. Esto le hacía la vida imposible. No tenía aire acondicionado y el tejado necesitaba reparaciones importantes. Los animales entraban regularmente en su casa. Todo esto creaba una mala situación para alguien de su edad con problemas de salud.

Agnes también estaba en mala forma física, ya que no solo le costaba caminar, sino que cocinar, limpiar y vestirse sola era algo que suponía un verdadero reto para ella. Sacar la basura por sí misma era imposible. Desde que su marido había fallecido, Agnes no tenía a nadie en su vida que estuviera dispuesto a ayudarla, y la familia que le quedaba no le prestaba atención.

Agnes sabía que tenía que hacer algo con respecto a su situación, pero no sabía a quién acudir. Si embargo, afortunadamente se topó con Operation Blessing, que, según The Christian Broadcasting Network, recibió ayuda de voluntarios de la Universidad Regent para hacer algunos pequeños extras para Agnes.

Operation Blessing es una organización benéfica y, según su sitio web, es una "organización humanitaria sin ánimo de lucro con sede en Estados Unidos. Operation Blessing proporciona ayuda estratégica en docenas de países de todo el mundo. Mediante programas básicos de ayuda en caso de catástrofe, atención médica, ayuda contra el hambre y agua potable, OB se dedica a demostrar el amor de Dios aliviando las necesidades y el sufrimiento humanos en Estados Unidos y en todo el mundo".

Con sus fieles partidarios, la organización se dedica a proporcionar alivio físico a cualquier persona que necesite ayuda inmediata.

Una vez que los miembros de Operation Blessing se enteraron de la situación de Agnes, inmediatamente entraron en acción. Fueron a su propiedad y derribaron un viejo remolque, así como un cobertizo que había dado grandes problemas. Ese era el único trabajo que habían acordado realizar al principio.

Entonces se produjo un milagro. Agnes fue a su propiedad y descubrió que empezaron a aparecer muchos más voluntarios. Se trataba de personas a las que Agnes nunca pidió ayuda ni esperaba que se presentaran en su casa. Al parecer, la gente de Operation Blessing no le había dicho a Agnes que iban a solicitar ayuda adicional.

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Estos voluntarios no solo hicieron lo mínimo que Agnes necesitaba, sino que también se ocuparon de hacerle un nuevo camino hacia su patio trasero. También plantaron algunos parterres en el jardín de Agnes. Retiraron todos los escombros que había fuera de su casa. Incluso repararon su tejado. Esto ayudó a Agnes a tener un arreglo a largo plazo del estado de su casa y mejoró la calidad de su vida en general.

"Empezaron a trabajar y sí que hicieron un buen trabajo", dijo Agnes, según la Christian Broadcasting Network. "Y todos ellos son mis angelitos. Y nunca los olvidaré. Y los quiero".

Todas estas personas estaban dispuestas a ayudar y prestar asistencia a una viuda de más de 90 años en una situación muy difícil. Los voluntarios de esta organización hicieron más de lo que se les pidió. Lo hicieron para ayudar de forma altruista y cariñosa y pudieron cambiar drásticamente la vida de una mujer en el proceso. Puede que fuera algo pequeño para los voluntarios, pero fue algo enorme para Agnes.

Agnes solo tenía una petición cuando le preguntaron qué necesitaba. "Necesito un aire acondicionado. Por favor, consíganme un aire acondicionado", les dijo Agnes, y la sorprendieron con uno. "Dios los bendiga y son maravillosos. Y los quiero a todos. He sido muy bendecida y Dios nunca me ha abandonado. Sigue estando conmigo". Esta historia demuestra que el poder de una comunidad que se une no puede pasarse por alto y merece ser celebrado.

Ver la voluntad y la ayuda de estas buenas personas puede ser una verdadera inspiración ¿Alguna vez has realizado un trabajo voluntario o algún voluntario te ha ayudado? ¡Cuéntanos tu experiencia y comparte esto con tus amigos!