Una perra gravemente herida se arrastró hasta un trotador para buscar ayuda
Sep 30, 2019 by apost team
Cuando un trotador de Atlanta se dio cuenta de que una perra estaba acurrucada debajo de un auto, entendió que algo no estaba bien.
La perra estaba terriblemente herida, pero pudo arrastrarse hacia su posible salvador y empezó a mover la cola. Sorprendido, el buen samaritano se le acercó. A pesar de haber sufrido un violento ataque, la perrita seguía siendo amigable y abierta con los seres humanos.
El corredor llamó a un centro de rescate ubicado en Nueva York, y allí el personal se puso manos a la obra para salvar a la perrita. Al examinarla más de cerca, se descubrió que tenía una pierna aplastada, lesiones internas como resultado de una bala que había quedado alojada en su abdomen, y una fractura de mandíbula.
Junto al video que publicó el centro de rescate cuando encontraron a Lilac por primera vez, un representante escribió:
"Parece que varios perros la atacaron durante mucho tiempo. Las espantosas lesiones de Lilac están más allá de las posibilidades de nuestro centro. Su mandíbula está gravemente fracturada, sus huesos están expuestos y está cubierta de heridas punzo-penetrantes por todas partes. Parece que una de sus piernas está fracturada, una de ellas parece tener un daño grave en los nervios. Tiene todo inflamado y le duele cuando la tocan. Tiene una herida abierta en la pierna, que literalmente se puede ver desde el otro costado . Pesa solo 9 kilos, y parece que ha estado sufriendo por mucho tiempo, está sucia, y el olor que desprende es nauseabundo. Es desgarrador y aterrador ver esto en primera persona. Hay una gran posibilidad de que pierda parte de su mandíbula inferior".
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Era evidente que la perra había sido atacada brutalmente, tanto por animales como por seres humanos. A pesar de su sufrimiento, la perra herida se mantuvo optimista y amistosa, moviendo su cola cada vez que alguno de los miembros del personal se le acercaba.
Durante varios días su condición siguió siendo precaria. La cachorra, a la que empezaron a llamar Lilac, tuvo que someterse a varias cirugías antes de poder recuperarse. El personal médico no pudo salvarle la pata, pero ella pudo recuperarse completamente de lo demás. Durante todo su proceso de recuperación, Lilac mantuvo su actitud positiva y gentil, recibiendo con agrado toda la atención que el personal le pudo dar. Sus ganas de vivir hicieron que muchos miembros del personal se enamoraran de ella y se sintieran inspirados. Las personas que han leído su historia a través de las redes sociales también han sentido lo mismo.
Después de su completa recuperación, Lilac fue adoptada por una cariñosa familia, que se siente agradecida con los rescatadores y con los extraños que la ayudaron a a salir adelante, gracias a sus habilidades y a su energía positiva. Pero lo más importante de todo es la fuerza de voluntad, la amabilidad y las ganas de vivir que mostró la perrita, a pesar de su sufrimiento.