Talentosa niña de 7 años dirige una orquesta de puros adultos

Abr 20, 2020 by apost team

Anastasiia Tiurina es una niña de 7 años de edad que toca la balalaica triangular rusa. Pero lo más sorprendente es que ella dirige a toda la Orquesta Académica Nacional de Instrumentos Folclóricos Rusos.

¿El talento se construye, o es algo que nace con la persona? Este es un tema controvertido, que siempre genera candentes debates, sobre todo cuando aparece alguien que demuestra tener un talento excepcional. Beethoven empezó a componer e interpretar canciones a la tierna edad de siete años. Mozart, por su parte, empezó a componer canciones a los cuatro años, y para cuando tenía 12 contaba con un repertorio de diez sinfonías. Si pensamos en esos grandes prodigios, podemos inclinarnos a reconocer que el talento es un don natural.

Para muchos, es algo que se da de forma espontánea. Y tal vez el caso más reciente sea el de Anastasiia Tiurina, de 7 años, que sorprendió a la audiencia al interpretar una clásica canción folclórica rusa llamada "Valenki". Anastasiia se destacó por ser la única niña: todos los demás músicos eran adultos. Ella tocaba para la Orquesta Académica Nacional de Instrumentos Folclóricos Rusos.

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Antes de que todo empiece, vemos que los músicos ya están en el escenario, sentados estratégicamente en sus lugares, y sosteniendo sus instrumentos. Anastasiia tiene el honor de ir sentada al frente de la fila, como dirigiendo toda la obra. La niña lleva en sus manos un poderoso instrumento: una balalaica triangular rusa. Y se destaca de inmediato.

Los orígenes de este instrumento triangular, que parece una guitarra, se remontan al siglo XVIII. Su estructura y su diseño personifican la dombra, que es un instrumento de tres cuerdas que se diferencia de la balalaica por su cuerpo redondo. La Enciclopedia Británica señala que tanto la dombra como la balalaica fueron descubiertas y utilizadas ampliamente en las culturas de Rusia y de Asia Central.

El video que documenta la actuación de Anastasiia empieza como de costumbre: usando sus brazos y dedos, la pequeña directora le hace señas a la orquesta, para que todos se preparen. Anastasiia lleva a la orquesta a los tonos iniciales, tocando solo la balalaica durante unos segundos. Entonces la orquesta se une con varios tonos e instrumentos. Se pueden escuchar unos pocos instrumentos de cuerda y de lengüeta doble, seguidos inmediatamente por buenos instrumentos de viento con lengüeta doble. Es un comienzo bien articulado, tanto para Anastasiia como para toda la orquesta. Esta orquesta rusa, única y exquisita, combina varias herramientas e instrumentos de gran relevancia cultural. La orquesta rusa es diferente de la orquesta occidental actual, destacándose por el uso de varios tipos de instrumentos de viento-madera y por incorporar diversos metales.

Anastasiia y la orquesta estuvieron notablemente bien para el "Valenki", mezclándolo con ritmos armoniosos. Hay un flujo ordenado de destacados instrumentos rusos de cuerda y viento-madera, que ayudan a mantener la suave melodía. Tras la apertura que tocó Anastasiia, cuando la orquesta toma el control, podemos escuchar un solo de oboe, y a un percusionista que se acopla para mezclarse con la melodía de la niña de siete años. Entonces llega el momento de dejar que Anastasiia tenga su momento de fama, y ella lo aprovecha con mucha valentía. La orquesta baja el tono de los instrumentos, pero Anastasiia sigue tocando para hacer un breve solo. Primero toca unos cuantos tonos atrevidos, que pronto se convierten en veloces rasgueos.

Si solamente escucháramos la música, sin ver el video, podríamos pensar que Anastasiia es una artista adulta y experimentada. Sus diminutos brazos tocan las cuerdas del instrumento con mucha habilidad, a pesar de tener solo siete años. Puedes ver lo comprometida que está Anastasiia mientras interpreta su papel en la obra. El resto de la orquesta apoya a la joven, y ella le entrega el alma a sus instrumentos con alegría y entusiasmo. Se nota que está disfrutando al máximo su actuación, a juzgar por sus expresiones faciales.

Hacia el final, todos terminan la pieza con una nota alta, y Anastasiia le hace una reverencia al extasiado público, antes de salir del escenario. Nuestros oídos no se equivocan: la obra "Valenki" fue electrizante, y los aplausos del público lo corroboran. Con toda razón, Anastasiia fue el centro de atención. ¡Ella tiene mucho talento!

¿Qué te pareció la actuación de Anastasiia? ¿Te imaginabas que una niña de siete años pudiera tocar tan bien? ¡Déjanos tus comentarios, y no te olvides de compartir este artículo con tus amigos!