Profesor de 70 años sin esposa ni hijos es estricto en la escuela y los estudiantes descubren que hace voluntariado en un hospital de niños después de clase

Feb 03, 2020 by apost team

Jim O’Connor, un veterano de la guerra de Vietnam, de carácter profundamente firme, trabaja actualmente como profesor de matemáticas. Lo conocen por su cabello corto y por mantener el corte al estilo militar. Siempre está alerta como un águila controlando y vigilando a sus estudiantes.

Debido a sus muchos años de servicio militar, Jim mantiene su voz de mando, la cual ningún estudiante se atreve a desafiar. Rara vez tolera la irritabilidad de los adolescentes o cualquier otro ruido en sus clases.

De acuerdo con TODAY, Jim se ha labrado una respetada reputación en la escuela preparatoria St. Francis, California, donde enseña álgebra y cálculo. Incluso el más revoltoso de los chicos se comporta en su presencia. Fue cuando conocieron el otro lado de Jim que quedaron boquiabiertos.

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Fuera del aula, Jim es una persona completamente diferente a la estricta figura que muestra. Durante los fines de semana y después de clases a las 5 de la tarde, relaja su firmeza y se convierte en un arrullador de bebés. Jim trabaja como voluntario en un hospital de niños en Los Ángeles, donde sacrifica su tiempo, y varios días a la semana, para cuidar de bebés enfermos.

Ha sido voluntario durante más de 20 años. El profesor de matemáticas comenzó su trabajo como volunario en el hospital tiempo atrás cuando un colega lo convenció para que hiciera donaciones de sangre.

Ya que tiene O negativo como tipo de sangre, Jim es un donante universal. Comenzó a frecuentar el hospital para donar sangre y plaquetas. Desde su primer contacto con el hospital, ha logrado aportar 272,55 litros de sangre y es uno de los mayores donantes de la institución.

Luego de unas cuantas visitas al hospital, Jim vio a bebés enfermos que sufrían para recuperarse de diversas enfermedades. Para su sorpresa, descubrió lo bien que se le daba sostenerlos y abrazarlos. Sin tener hijos, Jim ni siquiera había considerado hacer terapia de abrazos para bebés, pero luego de esa primera vez regresó de forma recurrente para ofrecer a esos niños cuanto consuelo pudiera.

Jim confiesa amar a los niños y cuidar de ellos. Los médicos en el hospital lo aprecian, principalmente porque es un imán de niños. El video muestra a Jim dando muestras de todo su amor a los bebés enfermos y cuidándolos.

Por ello, el personal médico lo adora y lo tiene en muy alta estima, por todos los sacrificios que hace por los niños. Echa un vistazo para que veas por qué se ha ganado ese apodo y el respeto de sus estudiantes.

¿La historia de Jim conmovió tu corazón? ¿Conoces a alguien que viva una "doble vida" al igual que Jim O'Connor? Cuéntanoslo en la sección de comentarios y no dudes en compartir la historia con tus amigos y familiares.