Meghan Markle dijo que siente un "dolor insoportable" al hablar de la devastadora pérdida de su embarazo

Nov 27, 2020 by apost team

Meghan Markle, de 39 años, ha perdido su segundo hijo con el príncipe Harry tras un aborto espontáneo, según ha revelado el pasado 25 de noviembre en una pieza de opinión que ha escrito para el New York Times.

Según el desgarrador ensayo, Markle perdió a su hijo en julio de este año después de sufrir un "calambre agudo" que la hizo caer al suelo con su hijo Archie en brazos.

El artículo, titulado The Losses We Share (Las pérdidas que compartimos), presenta un relato crudo de la angustiosa experiencia de Meghan Markle, junto con su descontento por el hecho de que, aunque muchas mujeres sufren abortos espontáneos, la conversación sobre el tema sigue siendo un tabú.

Lo que comenzó como un típico día de verano, lleno de los recados y responsabilidades de una madre normal, dio un vuelco terrible poco después de cambiarle el pañal a su hijo Archie.

"Sentí un calambre agudo", escribió Markle. "Me caí al suelo con él en los brazos, tarareando una canción de cuna para mantenernos tranquilos; la alegre melodía contrastaba con mi sensación de que algo no iba bien".

"Supe, mientras abrazaba a mi primogénito, que estaba perdiendo a mi segundo hijo".

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Markle recuerda haber estado en el hospital con su marido, el príncipe Harry, mientras los dos procesaban y lloraban la pérdida de su hijo nonato.

"Horas después, estaba en la cama del hospital, sosteniendo la mano de mi marido", escribió. "Sentí la humedad de la palma de su mano y le besé los nudillos, mojados por las lágrimas de ambos".

Explicó que su experiencia la llevó a ella y a su marido a investigar sobre el tema, y descubrieron que un asombroso número de mujeres tienen abortos espontáneos. Sin embargo, todavía se habla poco de ello públicamente.

"En el dolor de nuestra pérdida, mi marido y yo descubrimos que en una habitación de 100 mujeres, de 10 a 20 de ellas habían sufrido un aborto espontáneo", escribió Markle. "Sin embargo, a pesar de lo asombrosamente común de este dolor, la conversación sigue siendo tabú, plagada de vergüenza (injustificada), y perpetúa un ciclo de luto solitario".

El artículo es otro ejemplo de la ruptura de la exactriz con la tradición real. Aunque Markle no es la primera de la realeza en sufrir el "insoportable dolor" de perder un hijo, es la primera en hablar abiertamente y en público de la experiencia. Sophie, la condesa de Wessex, tuvo un aborto espontáneo a sus seis semanas de embarazo en 2001, mientras que Zara Tindall, nieta de la reina Isabel II, tuvo dos abortos espontáneos.

La familia real generalmente evita compartir detalles personales o emocionarse en público, y la reina Isabel no ha hablado de su vida privada ni en una sola entrevista en sus 68 años de reinado.

La decisión de hacerlo no es algo impropio de Markle. El año pasado, en un documental que los siguió a ella y a su marido en su gira real por África, el periodista Tom Bradby le preguntó a Markle si estaba "bien", a lo que ella dio una respuesta sorprendentemente honesta.

"Cualquier mujer, especialmente cuando está embarazada, es muy vulnerable, y eso lo ha hecho muy desafiante. Y luego cuando tienes un recién nacido, ya sabes. Y especialmente como mujer, es difícil", dijo Markle.

En ese momento, Markle se había enfrentado al escrutinio de la prensa inglesa, lo que la llevó a ella y a su marido a emprender acciones legales contra los tabloides, como se indica en su sitio web oficial. Ella expresó su gratitud por la preocupación del reportero.

"Gracias por preguntar, no mucha gente ha preguntado si estoy bien, pero es algo muy real que sucede detrás de cámaras".

La conversación de Meghan con el reportero fue incluso más sincera cuando él le preguntó si se podía decir que ella realmente no estaba tan bien, y si ha sido una lucha, a lo que ella respondió: "Sí".

Markle recordó este encuentro, así como su importancia, en su pieza de opinión para el New York Times

"'¿Estás bien?', me preguntó un periodista. Le respondí con honestidad, sin saber que lo que dije resonaría con tanta gente, con las mamás primerizas y las más experimentadas, y cualquiera que, a su manera, hubiese estado sufriendo en silencio", escribió Markle. "Mi respuesta sincera pareció darle permiso a la gente para decir su verdad. Pero responder honestamente no fue lo que más me ayudó, sino la pregunta en sí misma".

Esa experiencia la ayudó a darse cuenta de la importancia de esa simple pregunta, una pregunta que puede ayudar a otra persona a sentirse libre de quitarse un peso de encima.

"Sentada en una cama de hospital, viendo cómo se rompía el corazón de mi marido mientras él intentaba sujetar los pedazos destrozados del mío, me di cuenta de que la única forma de empezar a recuperarse es preguntar primero: '¿Estás bien?'".

Con su pieza de opinión, Markle espera animar a otras personas a que también se abran a hablar sobre sus pérdidas.

"Este año nos ha llevado a muchos de nosotros a nuestro límite personal", escribió. "Así que, en este Día de Acción de Gracias, comprometámonos a preguntar a los demás: '¿Estás bien?'".

Nuestro más sentido pésame al príncipe Harry y Meghan Markle mientras procesan su trágica pérdida.