Madre queda boquiabierta después de que un hombre le construyera a su hijo de 208 cm y con autismo un nuevo columpio sin cobrarle
Abr 13, 2019 by apost team
Para Cobey Thomas, la vida no siempre ha sido fácil un camino de rosas, pero eso nunca le ha impedido divertirse en el área de juegos infantiles. Este asombroso joven de 23 años padece de autismo, que lo ha llevado a experimentar un desarrollo tardío y dificultades para adaptarse a los cambios en su rutina. Pero a pesar de esas luchas, Cobey tiene un gran corazón y mucho amor por las cosas simples de la vida, como balancearse en un columpio.
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"El venía a casa del parque y había sangre de verdad", Jenifer, la madre adorable de Cobey, le dijo a las noticias locales de su ciudad en Knoxville, Tennessee.
En verdad, utilizar un parque de juegos diseñado para niños no solo era poco práctico para este dulce gigante, sino que también era sumamente peligroso.
Por esto, los padres de Cobey le prohibieron utilizar los columpios, por temor de que se lastimara en el futuro. Sin embargo, Cobey no solo estaba devastado sino que experimentaba angustia emocional y dificultad para dormir por no poder disfrutar de su pasatiempo favorito.
Como cualquier madre devota, Jenifer había tomado la decisión de hacer feliz a su hijo otra vez, sin importar cuánto le costara. Así que comenzó llamando a contratistas locales para ver si alguno era capaz de construir un columpio, en el patio de la familia Thomas, que se adaptara a Cobey.
"Yo les decía que mi hijo mide 208cm, pesa 90kg y funciona quizás, a un nivel de un niño de 3 años", dijo Jenifer, describiendo la conversación que tuvo con casi 200 contratistas. "Ellos decían que ni hablar".
Aquí es cuando entra en escena Adam Ellis. Recomendaron a este contratista local a la familia Thomas. Mientras que otros se negaban a aceptar el desafío, este heroico manitas se presentó en el sitio casi inmediatamente, creando un plan para crear el columpio perfecto para alguien con la altura de Cobey. Después de una planificación inteligente,
Ellis logró construir la estructura en cuestión de días. Como fue construido durante las fiestas, fue presentado a Cobey cubierto de adornos navideños.
Pero ese no fue el único regalo de Navidad para la familia Thomas. Durante la construcción, Jenifer estaba secretamente preocupada de que el costo de construir un columpio tan grande y personalizado fuera astronómico. Pero cuando llegó el momento de arreglar cuentas con Ellis, este le dijo que era un regalo de Navidad.
Creemos que todos deberían saber de esta historia, no solo para concienciar sobre el autismo, sino también para recordarnos que nuestros actos de amabilidad pueden significar mucho para la gente que más los necesita. Cuéntanos sobre cómo te afectó la historia de Cobey y si alguna vez te has cruzado con alguien como Adam Ellis que te haya ayudado en tu vida.