Le pidió al padre de su donante que la escoltara hasta el altar en el día de su boda
Dic 24, 2021 by apost team
Actualmente hay más de 100.000 personas esperando a recibir un trasplante de órgano, solo en los Estados Unidos. Diana Donnarumma, una chica de 28 años que vive en Buffalo (Nueva York), estaba en esa amarga lista de espera. Estaba batallando contra la disautonomía, una enfermedad que afecta al sistema nervioso autónomo. Debido a su enfermedad, Diana necesitaba un trasplante de intestino urgentemente. Por fortuna apareció un donante, y los médicos lograron salvarle la vida a tiempo.
Un año después, la chica tuvo la oportunidad de ponerse en contacto con la familia del donante, a la que se le dio la opción de comunicarse con el receptor o no. Daniel Donnelly Jr., el padre de Heather, la donante, aceptó la invitación de Diana y conversó con ella por teléfono. Según el Daily Mail, la conversación fue tan conmovedora que Donnarumma pasó dos días llorando, a medida que Donnelly Jr. le contaba lo maravillosa que era su difunta hija.
Después de esa sentida conversación telefónica, Diana decidió empezar una campaña para crear conciencia sobre la importancia de donar órganos, como forma de celebrar la vida de Heather. Cuando Donnelly Jr. y Diana se conocieron en persona, él le contó que Heather había muerto en un accidente automovilístico, justo antes de que se casara con su prometido. Al escuchar ese relato, a Diana se le ocurrió una gran idea.
La joven de 28 años invitó a Donnelly Jr. a su boda, pero no iba a ser un simple invitado. Como sabía que el hombre había perdido la oportunidad de llevar a su hija al altar, Diana le pidió que la acompañara en ese día tan especial. Donnelly Jr. aceptó, y el 13 de agosto le rindieron homenaje a Heather yendo al altar tomados de la mano.
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Según el reporte del Daily Mail, Diana Donnarumma trataba de contener las lágrimas mientras caminaba, tomando la mano de Donnelly Jr. Antes de llegar al altar, el padre de Diana abrazó a Donnelly Jr. y ocupó su lugar hasta los últimos pasos.
"Cuando lo vi llorando, me puse a llorar también", le dijo la chica al medio de comunicación.
"Me dijo que se sentía honrado de acompañarme al altar, y que estaba muy contento de tener una nueva hija", añadió.
La joven de 28 años también le dijo al Daily Mail que espera que su historia demuestre el "poder que tiene la donación de órganos".
"La muerte es una tragedia, pero el trasplante es una luz de esperanza en medio de toda esa tragedia. El trasplante me dio la vida que nunca pensé que podría tener", dijo Diana.
En Estados Unidos mueren 17 personas diariamente a la espera de un trasplante, y cada 9 minutos alguien entra en la lista de espera.
"Para empezar, se donan muy pocos órganos, así que los pacientes en espera tienen escasas posibilidades de recibir uno. Los expertos explican que los conceptos erróneos que existen sobre los requisitos para ser donante cohíben a mucha gente. Además, en algunos estados, los engorrosos procesos de registro impiden que muchas personas se conviertan en donantes registrados", tal como expone el New York Times en un editorial de agosto de 2019.
En el mismo artículo, el Times señala que la "forma más prometedora de acabar con la escasez de órganos es simplemente persuadir a más personas para que se conviertan en donantes".
Según la Administración de Recursos y Servicios Sanitarios del gobierno estadounidense, cada donación de órganos puede salvar unas 8 vidas.
Diana Donnarumma, que se casó en agosto pasado, fue una de esas vidas que pudieron salvarse.
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