Demanda a su exesposa por "engañarlo" y hacerle creer por más de 20 años que era el padre de sus tres hijos

Sep 15, 2020 by apost team

Imagínate que recibes un diagnóstico médico devastador, uno que altera todo tu futuro y básicamente tira a la basura tus mayores logros. Eso fue lo que le pasó al millonario Richard Mason. Pero él no se quedó de brazos cruzados, y ahora está pagando un precio muy alto.

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Richard, de 55 años, era como un inocente insecto que se había quedado atrapado en una entramada red de mentiras, todas tejidas por su ex esposa. Pero el empresario británico agarró el toro por los cuernos cuando descubrió el engaño, y eso cambiaría su vida (y la de sus hijos) para siempre. Su caso se ha convertido en un tema de conversación muy popular, y algunos incluso consideran que él es el malo de la historia. Pero uno tiene que conocer toda la historia para poder formarse su propia opinión.

Como suele pasar, el primer matrimonio de Richard con su ex esposa Kate, de 54 años, no funcionó. Él y Kate estaban criando tres hijos juntos, antes de que se divorciaran en 2008. Ya en 2016 Richard se había vuelto a casar, y estaba planeando formar una nueva familia. Pero sus esfuerzos no rendían fruto.

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Richard le dijo al Daily Mail que cuando empezó a sentir dolores en el pecho, hizo una visita al médico. Él pensaba que podía deberse a la pleuresía, una condición con la que había estado lidiando durante un año. Sin embargo, lo que descubrió le iba a cambiar su futuro y su pasado para siempre.

Los médicos le dieron un diagnóstico devastador de fibrosis quística. El diagnóstico fue particularmente chocante, ya que a Richard lo habían examinado en los años 80 para descartar esa enfermedad, debido a que su hermana, quien falleció en 1989, sufría de lo mismo. Pero en aquel entonces, a Richard le dijeron que no tenía fibrosis quística.

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No obstante, las malas noticias no habían terminado. Los médicos le explicaron a Richard que el 98% de los pacientes varones con fibrosis quística son infértiles, lo que significa que no iba a poder tener hijos con Emma, su nueva esposa. Además, tampoco parecía probable que hubiera podido engendrar a los hijos de 23 y 19 años que supuestamente había tenido con su ex esposa.

Mientras seguía en estado de shock, le envió un mensaje de texto a Kate. Le dijo tranquilamente que solo estaba buscando algunas respuestas, y que iba a seguir sus consejos sobre cómo decirle la verdad a sus hijos, a menos que ella quisiera que él se sometiera a pruebas de paternidad. Incluso le dijo a Kate que quería seguir formando parte de sus vidas.

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Supuestamente, Kate respondió al instante negándolo todo categóricamente. Le dijo que los niños eran suyos, a pesar de lo que sugerían los médicos. Richard no se sintió muy convencido, así que le contó todo a su hijo mayor, y el muchacho confrontó a su madre.

Kate confesó haber tenido una aventura durante esos 20 años de matrimonio, pero se mantuvo firme en que había tenido sexo seguro, y que por eso Richard era el único padre posible de sus hijos.

Teniendo en cuenta todas las mentiras y las incertidumbres, Richard consultó a un experto en fraudes de paternidad, y así fue como empezó la demanda. Un tribunal de familia revisó el acuerdo de divorcio original, y Richard exigió una indemnización por daños y perjuicios debido al fraude de paternidad.

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Según el Daily Mail, las pruebas médicas que se llevaron a cabo demostraron que en realidad Richard no era el padre biológico de los niños a los que crió, amó y mantuvo por 20 años. Aunque el hijo mayor se negó a hacerse la prueba, alegando que Richard seguía siendo su padre de todas maneras, se demostró que Richard era incapaz de producir esperma.

El hijo mayor le había advertido a Richard que no volvería a hablar con él si demandaba a su madre, y se ha mantenido fiel a su palabra. Solo uno de los hijos mantiene cierta comunicación con Richard en la actualidad.

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Kate había recibido más de 5 millones de dólares por el acuerdo de divorcio original. A raíz de la demanda, ella tuvo que devolverle casi 500.000 dólares a Richard. Aunque la victoria legal puede haberlo ayudado a conservar su dignidad, ahora Richard sabe que no es padre, que nunca lo será, y que su apellido no podrá preservarse por medios naturales.

Él dice que lo más duro ha sido ver a sus hijos, que él pensaba que estarían en su futuro, a través de la lente distante de Facebook, porque esa fue la única forma de ver a su hijo mayor en su graduación. Richard siente que su vida está incompleta: hace poco nació el que sería su primer nieto, y también tuvo que enterarse a distancia.

Sin embargo, mantiene un poco de esperanza porque se comunica a través de mensajes de texto. Hace poco, uno de sus hijos le dijo que siempre sería "su papá", y le expresó su amor.

Ahora que el drama de su vida se volvió viral, Richard ha confesado que demandó a su ex mujer porque sintió que le había pisoteado su orgullo. Sin embargo, también dijo que no tomó ninguna de sus decisiones sin el debido cuidado.

Por ejemplo, ha dicho que nunca hubiera tomado esa decisión si todos sus hijos no fueran adultos. Él sigue esperando que ellos entiendan que él tenía que demandar a su madre. Richard quería darle una lección a Kate y acabar con sus secretos y sus mentiras para siempre.

¿Crees que Richard hizo lo correcto? ¿Qué habrías hecho tú si te hubieras enfrentado a una situación como esta? Déjanos tu opinión en la sección de comentarios, y no te olvides de compartir esta devastadora historia con tus conocidos.

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