Unos padres le dicen a su hijo que no pueden cuidar de un discapacitado. Así es como reaccionan después de que él perdiera sus extremidades en la guerra
Oct 24, 2018
¿Qué haces cuando tus padres no pueden amarte por lo que eres? La historia de este soldado herido te romperá el corazón y cambiará tu forma de pensar para siempre.
Un valiente soldado finalmente logra ver concedido su deseo de volver a casa con sus padres tras perder ambas piernas y un brazo en Corea. Cuando aterrizó en Los Ángeles, llamó a sus padres para comunicarles que estaba de vuelta en suelo americano y que pronto volvería a casa. Sin saber cómo contarles a sus padres lo que le había sucedido en la guerra, empezó por decirles que traía consigo a su amigo herido.
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"Mi amigo pisó una mina terrestre y perdió las piernas y el brazo, por lo que no puede vivir solo y quiero ayudarle", le dijo a sus padres. "Eso es terrible, hijo. Tal vez podamos ayudarle a encontrar un buen lugar para vivir", respondió su padre. "No, papá, esperaba que tú y mamá lo dejaran vivir con nosotros. Le vendría bien una familia ahora mismo."
"Cariño, creemos que no eres consciente de lo difícil que es cuidar de una persona discapacitada", dijo su mamá.
"Necesitan cuidados constantes, terapia física y nuestra casa no está construida para permitirle vivir aquí cómodamente. Tendríamos que dejar todo lo que hacemos y pasar todo el tiempo cuidando de él. Ya lo hicimos cuando estabas creciendo y no podemos permitirnos el lujo de hacerlo de nuevo. Hay toneladas de recursos para los veteranos heridos hoy en día. Alguien más podría ayudarle mucho mejor de lo que nosotros podríamos hacerlo."
Sorprendido, su hijo colgó el teléfono inmediatamente. Sin un número para comunicarse con él y sin tener idea de cuándo y si volvería a casa, los padres se preocuparon. Más tarde se enteraron de que su hijo era el soldado herido que estaba aterrorizado sobre cómo reaccionarían sus padres. Sintió el rechazo de sus padres de forma tan devastadora que pensó que no podía seguir adelante. Sin el apoyo de sus padres, la gente que se suponía que lo amaba más, no tenía a dónde ir.
Pocos días después, los padres recibieron una llamada del Departamento de Policía de Los Ángeles. Había un hombre en la morgue que supuestamente era su hijo. Tenían que volar hasta allá para identificar el cuerpo. Los padres se subieron al avión más cercano y se apresuraron a entrar en la morgue, donde encontraron a su hijo muerto.
Para su sorpresa, era su propio hijo el que había perdido las extremidades.
Ahora comparten su historia como una advertencia a todo el mundo sobre cómo el amor incondicional puede realmente salvar vidas. Todos necesitamos vivir con el corazón abierto y dispuestos a ayudar a los demás para no terminar perdiendo a alguien que amamos.
¿Te ha hecho llorar la historia de este soldado? Asegúrate de difundir este mensaje con tus amigos para que puedan cambiar su manera de ver las cosas.