Una perra angustiada no deja de ladrar a su dueña embarazada hasta que esta se da cuenta de que su mascota intenta salvarla
May 31, 2020
Todo buen dueño de un perro ama a su perro, pero incluso los perros más educados pueden ser molestos cuando quieren: desde ladrar cuando quieren comida hasta lloriquear para salir por décima vez consecutiva. Pero a veces el mejor amigo del hombre es un poco más sabio que nosotros, simples humanos, y sabe algo que nosotros no. En esos casos, simplemente se comunican lo mejor que pueden para ser útiles a sus padres humanos.
Ese fue el caso de una perra llamada Keola, que consiguió molestar seriamente a su familia con sus ladridos. Sin embargo, no lo hacía por una razón cualquiera: resultó que intentaba salvar la vida de su dueña.
En esta historia de 2016, Alhanna Burdis, Butler de soltera, de Doncaster, Inglaterra, estaba embarazada. Cuando Keola, la perra que comparte con su entonces novio y ahora marido, Ricky Burdis, no paraba de ladrarle, decidió ir al médico y, por suerte, fue diagnosticada justo a tiempo.
Keola, que es una akita americana, lleva con sus dueños desde que era solo una cachorra, por lo que su vínculo con ambos es muy fuerte. Cuando Alhanna descubrió que estaba embarazada, se emocionó ante la expectativa de añadir un nuevo miembro a su familia.
Pero, por alguna razón, parecía que Keola se preocupaba visiblemente. La gran perra ladraba constantemente ante la expansión del abdomen y el torso de su madre humana. Mientras tanto, en esa época, Alhanna empezó a experimentar fuertes dolores de espalda con el embarazo, informó The Mirror.
Cuando Alhanna fue al médico, este le aseguró que todo iría bien y que el dolor que sentía era solo por el peso del embarazo y su pequeña complexión. Aunque el médico parecía estar seguro de que todo iba bien, Keola no lo estaba. La perra siguió ladrando al torso de Alhanna, cada vez más desesperada.
Entonces empezó a mirar fijamente a los ojos de Alhanna, aparentemente suplicándole que hiciera algo y buscara ayuda. La mujer embarazada quería creer que todo estaba bien y que su perra solo estaba haciendo una tontería, pero admitió que aquel comportamiento inusual la asustaba. Así que hizo fotos del comportamiento de la perra y las publicó en Facebook, tratando de quitarle importancia a una situación que le resultaba espantosa. En lugar de reírse con ella, los amigos de Alhanna sugirieron que la perra podría estar tras algo y que podía ver -u oler- que algo iba mal.
Fue entonces cuando Alhanna hizo caso a las advertencias de Keola y volvió al médico. La segunda vez exigió respuestas y los obligó a hacer una exploración. Resultó que su situación era grave y Alhanna necesitaba estar en cuidados intensivos, según The Mirror.
La futura madre tenía lo que los médicos describirían más tarde como una "superbacteria", una enfermedad resistente a los antibióticos. Y, por si fuera poco, también tenía una grave infección renal en ambos riñones. Si no hubiera acudido al médico, habría muerto junto con su bebé, reportó la publicación.
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Gracias a Keola, Alhanna recibió el tratamiento que necesitaba para curar sus riñones y recuperarse de la superbacteria. Una vez recuperada, su siguiente visita al hospital fue para dar a luz a su precioso hijo, Lincoln. La familia estaba encantada y dijo a The Mirror que a Keola le encantaba cuidar del nuevo bebé.
Desde entonces, Alhanna ha seguido compartiendo su vida familiar en Facebook. Este mismo mes, publicó que Lincoln cumpliría 6 años en noviembre, mientras que el mes que viene el segundo hijo de la pareja, Huxley, cumpliría 1 año. En un emotivo post de Facebook a principios de año, Alhanna escribió sobre la relación entre sus dos hijos y compartió unas preciosas fotos. Decía:
"Ver el amor que se tienen es tan especial y me hace ser la mujer y la madre más orgullosa del mundo. Una madre de dos niños muy felices, sanos y queridos. Los dos tendrán mi corazón siempre 💙🌹💙. Siempre sabré lo afortunada que soy y no tomaré ni un solo segundo por sentado".
Además, Alhanna ha creado una página de Facebook aparte para mostrar a su familia, en concreto la adorable relación de Lincoln y Keola. Titulada "Las aventuras de Keola y Lincoln", Alhanna escribió en la parte superior de la página:
"Keola es nuestra preciosa akita americana, me salvó la vida cuando estaba embarazada y han sido [inseparables]".
En la página, ha compartido fotos de sus dos hijos con Keola y es demasiado tierno para las palabras. Estamos seguros de que la familia Burdis estará siempre agradecida por este perro tan especial.
¿Qué opinas de esta extraordinaria historia? ¿Has experimentado alguna vez un comportamiento así por parte de un perro? Cuéntanoslo y comparte esta historia a tus amigos y seres queridos.