Una amistosa nutria marina se le acercó a un hombre para jugar con él en la playa

Ene 21, 2020

Recientemente, un visitante en una playa de Canadá tuvo una espectacular interacción con la vida silvestre, la cual fue captada por las cámaras. Las nutrias marinas salvajes no tienen fama de acercarse a los seres humanos, pero casualmente una de ellas se le acercó a un hombre que caminaba entre las olas, y pasó unos minutos compartiendo con él.

Las nutrias salvajes se encuentran en la mayoría de los océanos septentrionales del mundo, y viven cómodamente en las aguas frías gracias a su pelaje y a su espesa piel. Estos animales pasan la mayoría de su tiempo en el agua, y aunque son capaces de vivir en el agua a tiempo completo, también aprovechan la orilla para descansar y relajarse, como se explica en Worldwildlife.org. Cuando las nutrias están en tierra firme, muchos seres humanos aprovechan para ver cómo interactúan y juegan entre ellas.

Aunque las nutrias también pasan mucho tiempo en tierra, a la mayoría no les gusta interactuar con los seres humanos, y tienden a volver al mar en cuanto alguien se les acerca. Mucha gente ha reportado que las nutrias, también conocidas como perros de agua, se ponen agresivas cuando la gente se acerca a sus colonias, y por eso es importante ser prudentes con estos animales salvajes.

Sin embargo, parece que esta nutria marina en particular sentía mucha curiosidad por el hombre con el que se topó. Todo ocurrió en la playa de la Bahía de Cadboro, en Victoria, Columbia Británica, Canadá. Tal vez se acercó porque el hombre ya estaba en el agua, nadando en el hábitat natural de las nutrias marinas. El perro de agua se acercó al hombre, que solo estaba metido en el agua hasta las rodillas, y nadó alrededor y a través de sus piernas. Parece que la nutria marina examinó sus piernas y su ropa durante unos minutos, para ver si el hombre representaba una amenaza o no.

Pasaron unos momentos antes de que la nutria marina extendiese su pata para tocar las piernas del hombre, y luego hizo algo todavía más sorprendente. El perro de agua tiró juguetonamente de la pierna del hombre. Por fortuna, ambos participantes se respetaron mutuamente y ninguno de ellos sufrió daño alguno durante el amistoso saludo. El hombre incluso bajó su mano y acarició ligeramente la cabeza de la nutria marina, antes de que el animal regresara al océano para seguir buscando su alimento.

Los encuentros con la vida silvestre pueden llegar a ser muy especiales e inspiradores. Envíales este video a tus amigos que aman a los animales, para que les ilumine el día.