Un ingeniero en robótica demuestra que los tacones y las faldas no son exclusivos de las mujeres

Ago 31, 2021

Mark Bryan es un ingeniero robótico que lleva once años casado y tiene una hija. Se identifica como heterosexual y ha decidido vestirse de forma poco convencional. Bryan nació en Estados Unidos pero vive en Alemania y no cree que la moda deba estar atada al género. En un día cualquiera, puedes encontrarte con Bryan con falda y tacones mientras va de camino al trabajo o a cualquier otro lugar.

Bryan dice que no le gusta lo limitadas que son las opciones de los hombres en el departamento de moda, especialmente cuando se trata de ropa de oficina. Los pantalones de hombre solo existen en unas pocas variedades de color y corte, principalmente negro, gris, azul oscuro y alguno que otro con rayas.

Este hombre que se viste con mucho estilo cree que si a las mujeres se les permite llevar pantalones, los hombres también deberían poder llevar faldas y vestidos. A Bryan le gusta que las faldas se presentan en muchos estilos y estampados y que se ofrecen muchos más colores, a diferencia de la ropa de hombre.

Bryan prefiere mezclar los atuendos tradicionales del género llevando una ropa masculina de la cintura para arriba, como una chaqueta y una corbata, y un atuendo tradicionalmente femenino de la cintura para abajo, donde suele llevar una falda lápiz y tacones de diez centímetros.

Llevar tacones altos no es un problema para Bryan. Aprendió a hacerlo por primera vez cuando su novia de la universidad le pidió que usara tacones altos mientras bailaba con ella para que estuvieran al mismo nivel, y siguieron haciéndolo así durante más de un año.

Bryan no deja que los estereotipos o las suposiciones le impidan vestirse de una forma que lo hace feliz. Desafía las expectativas sin arrepentimientos. Sigue leyendo para escuchar lo que Bryan tiene que decir sobre su forma de vestirse.

Bryan tiene una idea muy clara de cómo le gusta vestir. Dijo a Bored Panda: "Para mí, la ropa no está atada al género. Prefiero las faldas a los vestidos. Los vestidos no me permiten mezclar los géneros. Prefiero un aspecto 'masculino' de la cintura para arriba y un aspecto sin género por debajo de la cintura. Se trata de que la ropa no tenga género".

Continuó: "Soy lo suficientemente mayor como para recordar que en el colegio las chicas no podían llevar pantalones. Ahora los pantalones se han convertido en una prenda sin género. Entonces, ¿por qué las faldas y los tacones deben tener género? Además, los hombres usaban tacones antes que las mujeres. Quizá no los tacones de aguja de hoy, pero los hombres usaban tacones antes que las mujeres".

Bryan tiene razón en eso. Los tacones en efecto tienen una larga historia. Aunque los historiadores y arqueólogos no han logrado establecer la fecha de su invención con claridad, existen al menos desde el siglo X. Y al principio no eran una moda. No, el primer uso registrado de los tacones altos fue eminentemente práctico: la caballería persa llevaba botas con tacones, llamadas kalash' o galesh, porque eso les facilitaba mantener los pies dentro de los estribos. Por cierto, ¡esta es la misma razón por la que las botas de vaquero también tienen un pequeño tacón!

Como tener un caballo era un signo de riqueza, solo los hombres acomodados podían permitirse llevar estas botas de tacón alto. Su uso se extendió poco a poco por Europa y los tacones altos se convirtieron en uno de los signos de moda de los nobles o comerciantes ricos. De hecho, tras el Cisma de Oriente en el siglo XI, incluso el papa llevaba tacones altos.

No fue sino hasta varios cientos de años después cuando la moda cambió lentamente. Durante el siglo XVIII, surgieron en Europa preocupaciones culturales sobre la distinción entre lo masculino y lo femenino y se habló de lo que debían llevar los hombres y las mujeres. De este momento procede la creencia de que la moda es algo afeminado y frívolo que no debe preocupar a los "hombres de verdad". Debido a estas creencias cambiantes, los hombres abandonaron en gran medida los tacones altos, ya que se consideraban poco prácticos.

Bryan es uno de los ejemplos de cómo los tacones altos están volviendo poco a poco a ser una forma de calzado aceptada por los hombres. Aunque el ingeniero defiende la opción de que los hombres lleven tacones altos, entiende que mucha gente mirará dos veces cuando lo vean pasar. Compara sus elecciones de estilo con alguien que elige teñirse el pelo de colores vivos. Lo explica así:

"Tomemos a una persona con el pelo verde brillante. El pelo verde no es normal. Levantas la cabeza y ves a esa persona, tu mente te dice que es una persona con el pelo verde, piensas que es raro o interesante, y luego vuelves a hacer lo que estabas haciendo y no vuelves a pensar en eso. Creo que es lo mismo cuando la gente me ve con falda y tacones".

Bryan tampoco tiene que esforzarse demasiado para encontrar faldas y tacones que le queden bien. Lleva una talla 8 en faldas y zapatos de tacón de 8,5, algo pequeño para un hombre. Si conoces a un amigo que esté pensando en probar usar tacones y faldas también, Bryan sugiere que empiece con un tacón más bajo hasta que se sienta más cómodo caminando con este tipo de zapatos.

¿Qué te parece la forma de vestirse de Bryan? ¿Conoces a algún hombre que camine con tacones? Cuéntanos y envía esta historia a tus amigos y familiares.