Un caballo huele el ataúd de su amado dueño y se lamenta en su funeral

Ago 27, 2021

Una y otra vez, los animales nos demuestran que no solo tienen emociones y sentimientos, sino que a veces incluso actúan de forma sorprendentemente humana en sus expresiones. Resulta muy gratificante poder tener mascotas, porque ellas nos brindan apoyo y forjan relaciones de por vida con nosotros.

Las personas que tienen animales de compañía conocen la alegría que supone tener un perro o un gato, pero otras personas tienen animales de granja, como cerdos y caballos. Estos animales también son muy inteligentes y gentiles. Los animales puedes reaccionar con mucha efusividad cuando están afligidos, y las historias populares, como la de Hachiko, han solidificado la creencia de que un perro puede ser fiel hasta el final de su vida, incluso tras la muerte de su dueño.

Sin embargo, en Brasil ocurrió algo que nos muestra hasta qué punto los caballos también son como los humanos, en lo que respecta al dolor y las emociones. Tras sufrir un accidente de motocicleta el día de Año Nuevo de 2017, Wagner Lima, un vaquero de origen paraguayo de 34 años, falleció. Quienes conocían a Wagner sabían lo que Sereno, su querido caballo, significaba para él, y que el sentimiento era mutuo.

En el funeral, mientras se llevaban a Wagner en un ataúd, quedó claro que Sereno sabía lo que le había pasado a su querido amigo. El duelo por la muerte es uno de los momentos más dolorosos y estresantes en la vida de cualquier persona, y como se ve en este video de 2017, los animales también sienten una inmensa angustia cuando pierden a un ser querido.

Durante muchos años, Wagner y Sereno fueron amigos inseparables. Wando, el hermano de Wagner, sabía que Sereno tenía que asistir al funeral. Él sabía que era crucial que el caballo estuviera junto a sus familiares y amigos humanos.

Durante una entrevista, Wando le dijo a Globo News que el caballo lo era todo para su hermano, y que parecía que el animal podía entender todo lo que estaba pasando. Wando sentía que para el caballo era muy importante poder despedirse de su mejor amigo.

Wando encabezó una emotiva marcha hasta el lugar de descanso eterno de su hermano, que se encontraba en la ciudad de Cajazeiraz, Brasil. Sereno marchó junto a toda la comitiva, pero nadie en la procesión se esperaba la reacción que tuvo el caballo cuando se acercó lo suficiente al ataúd de Wagner y percibió su olor.

"Cuando sacamos el féretro, al principio del funeral, (Sereno) empezó a sollozar, como si supiera que no iba a poder ver a su dueño nuevamente", le dijo a USA Today Francielio Limiera, un amigo cercano de la familia. "Golpeaba el suelo con sus pezuñas, y no dejaba de relinchar. Era una escena muy triste", continuó.

Tras presenciar esa reacción del caballo, Wando aseguró que cuidaría a Sereno, en honor a su hermano. Hay un video que muestra el emocionante momento cuando Sereno se da cuenta de que Wagner está en el ataúd. No es de extrañar que esta historia se haya viralizado, ya que nos demuestra que los vínculos entre los animales y los humanos son fuertes y profundos.

Los investigadores tienen pruebas científicas que demuestran la solidez, importancia y tenacidad que tienen las relaciones entre humanos y animales.

Según el Human Animal Bond Research Institute (en español Instituto de Investigación del Vínculo Humano-Animal, una organización sin fines de lucro dedicada a investigar los efectos positivos que tienen los animales de compañía), se ha demostrado que las interacciones positivas entre humanos y animales tienen efectos cuantificables mutuamente beneficiosos.

En los humanos, se ha descubierto que los animales de compañía tienen un impacto positivo en "las respuestas endocrinas, tal como lo indican los cambios en los niveles de cortisol, epinefrina y norepinefrina".

Y en los animales, concretamente en los perros, se demostró que el contacto con los humanos favorece la disminución de los niveles de cortisol, que es una hormona del estrés.

Y lo que es más, estos vínculos entre especies tienen miles de años de antigüedad. Según Pedigree, los humanos domesticaron por primera vez a los animales hace unos 12.000 o 14.000 años, tras descubrir que los lobos jóvenes podían ser entrenados para obedecer a sus dueños. Al principio, esta primitiva relación entre humanos y animales era muy práctica, ya que los lobos podían ayudar en tareas como la caza y el pastoreo. Sin embargo, Pedigree también señala que hay pruebas de que los humanos han tenido animales de compañía desde hace miles de años.

"Aunque es probable que los perros domesticados fueran tratados con respeto en las sociedades primitivas, hay pruebas de que al menos algunos también eran considerados compañeros hace ya 12.000 años. El hallazgo de una tumba paleolítica en el norte de Israel, en la que se enterró a un humano con un cachorro de perro o lobo, es muy ilustrativo de este punto. La mano del difunto estaba dispuesta de forma que descansaba sobre el hombro del animal, como para enfatizar el profundo afecto que se tuvieron en vida", explica Pedigree en su página web.

La conmovedora relación de Wagner con su caballo Sereno es un grandioso ejemplo de la antigua amistad entre humanos y animales.

Los caballos son animales increíbles, y son capaces de mucho más de lo que podemos imaginar. Comparte esta conmovedora historia con tus amigos y familiares, sobre todo con los que son amantes de los animales. ¡Y cuéntanos si alguna vez has visto a un animal actuando así!