Si quieres que tu hijo tenga buenos modales, abandona estas 5 cosas

Dic 05, 2018

Criar a tus hijos para que sean personas amables y atentas puede ser retador. Sin embargo, los padres pueden tener un papel esencial en cómo sus hijos desarrollan sus modales si practican de forma consistente y paciente un modelo a seguir. Es importante asumir este trabajo con seriedad.

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Aunque es fácil pensar en las cosas que deberían estar haciendo como padres para estimular los buenos hábitos, en lo que se suele fallar es en las cosas que no se deberían estar haciendo. A continuación hay cinco cosas a las cuales prestar especial atención al momento de enseñarle buenos modales a tu hijo para que lo acompañen toda la vida:

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1. DEJA de actuar como cobarde:

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Una de las peores cosas que puede hacer un padre es continuar permitiendo la mala conducta simplemente porque tiene miedo de lidiar con las consecuencias de un niño infeliz. Los padres tienen que recordar que ellos hacen las reglas y que el inminente colapso del niño no debería influenciar en la forma en la que el adulto reacciona simplemente porque tiene miedo de lidiar con las consecuencias. Enseñarle a tu hijo la diferencia entre un deseo y una necesidad es un buen comienzo para el proceso de tomar el control. Ceder ante cada antojo del niño solo empeorará la situación y cultivará la concepción de que se merece todo.

2. DEJA de justificar su mal comportamiento:

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Aunque es tentador justificar la mala conducta de tu hijo, la realidad es que al hacerlo estás estimulándolo a que siga en lo mismo. Lo que necesitas empezar a hacer es dejar de justificar su comportamiento y en lugar de eso trabajar para corregirlo. Mientras más tiempo sigas haciendo excusas, más enraizado e irreversible será este comportamiento. Una vez que cubras las necesidades básicas de tu hijo, puedes comenzar a lidiar con sus deseos en una forma que fomente buena conducta y buenos modales.

DEJA de decirles a los demás que no lo regañen:

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En el mundo de hoy, cada vez se acepta menos que los que no sean los padres del niño lo regañen. Sin embargo, algunas veces lo que más necesita un niño es que un adulto que respete lo regañe por su continuo mal comportamiento. Profesores, entrenadores y otros familiares son personas que deberían poder ayudarte en tu misión de inculcarles respeto y buenos modales a tus hijos. Siempre y cuando la forma de comunicación permanezca abierta, esto puede ser una experiencia positiva de aprendizaje para el niño.

DEJA de mimarlo:

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Algunas veces necesitas dar un paso atrás para ver todo el panorama. Es importante evaluar regularmente cómo es que lo que estás haciendo ahora en el corto plazo está ayudándolo a desarrollar hábitos positivos a largo plazo. Por ejemplo, ceder ante cada deseo material ahora no le está enseñando sobre el valor del dinero. En lugar de esto, deberías estarle enseñando sobre los principios de la responsabilidad y la gratificación retardada. Al pensar a largo plazo sobre tus estrategias de crianza, estarás preparando a tu hijo para una vida de hábitos sanos y de éxito.

DEJA de permitir atajos:

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Los buenos padres reconocen el mérito que tiene que su hijo trabaje por lo que realmente quiere. Enseñarles a ser pacientes y que las cosas no siempre llegan con tanta facilidad en la vida los ayudará a desarrollar los buenos modales que necesitan para el futuro. Establecer un horario de deberes para tu hijo es una forma ideal de inculcarle el valor del trabajo duro y la responsabilidad.

Con un poco de consistencia y un modelo de conducta intencional, puedes asegurarte de que tus hijos crezcan y se conviertan en adultos respetuosos y educados. No te guardes todos estos valiosos consejos de paternidad para ti. Tómate el tiempo de ayudar a algunos amigos y familiares con dificultades para que sepan cómo ellos también pueden fomentar los buenos modales en sus hijos. ¡Hagamos de este mundo un lugar más agradable juntos!