Se quedó dormido y, al despertar, encontró una gata callejera dormida sobre su panza
Abr 30, 2019
A veces, simplemente no podemos evitar tomar una buena siesta. Y eso es cierto tanto para los gatos como para los humanos. Recientemente, un hombre tomó una siesta fuera de su casa. Y cuando se despertó, se sorprendió al descubrir que tenía un nuevo amigo.
Ali Safa es originario de Canberra, Australia. Hace poco, se dio el gusto de pasarse el día descansando en su casa. Veía un poco de televisión, jugaba unos cuantos videojuegos y pasaba el rato en su jardín para disfrutar del sol. Simplemente quería relajarse un poco.
Al final se quedó dormido en su balcón por un buen rato. Y cuando despertó, se dio cuenta de que no estaba solo. De alguna manera, una gatita había terminado en su jardín. El felino se subió al estómago de Ali y lo acompañó durante toda la siesta. Y cuando Ali se despertó, la gatita seguía dormida.
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La siesta de Ali duró unas dos horas. No escuchó ni sintió al animal entrar en su jardín. Cuando despertó, se asustó. Pensó que una rata gigante estaba descansando sobre su estómago.
Nunca antes había tenido una mascota. Está acostumbrado a estar solo, y no ha tenido muchos amigos en su vida. Cuando notó la presencia de la gata, se quedó quieto para que ella pudiera seguir durmiendo. Ali se enamoró del ronroneo que hacía cuando dormía.
Ali le tomó una foto a su nueva amiga mientras dormía boca abajo, y la publicó en Internet. Sabía que era una historia divertida, pero no se imaginó que la foto y la historia se pudiesen viralizar. Hasta ahora, la comunidad de Reddit le ha dado a la foto más de 100.000 votos positivos.
La comunidad donde vive Ali es el hogar de muchos gatos callejeros, pero él sintió que su nueva amiga era especial. Ambos disfrutaron de una buena siesta, y se conectaron aún más cuando la gata se despertó.
La gata tenía algunas pequeñas heridas que le causaban preocupación, y parecía estar un poco desnutrida. En cuanto despertó, Ali le preparó a su amiguita algo de comer.
Luego, la llevó al interior de la casa para bañarla. Al día siguiente la llevó al veterinario y se detuvo en una tienda de mascotas para comprarle juguetes y comida a su nueva mejor amiga. Los dos se han vuelto inseparables desde el día de la siesta.
¿Te gustó la historia de Ali y la gata? ¿Cómo habrías reaccionado tú si te hubieras despertado con un gato callejero durmiendo sobre ti? Déjanos tus comentarios y no olvides compartir esta historia con tus amigos, para alegrarles el día.