Raquítica perra de la calle ve la puerta de un auto abierta y de inmediato entra y se sienta en el asiento delantero

Jun 04, 2019

Bill Shaver estaba conduciendo de vuelta a su casa en Missouri luego de un viaje de pesca en Arkansas en marzo.

En la vía, se detuvo para utilizar un baño en una estación de servicio; ya que su plan era estar ahí solo por unos minutos, dejó la puerta de su auto abierta.

¡Su espontánea decisión de dejar abierta la puerta cambiaría por siempre la vida de un perro de la calle!

Mientras que el señor Shaver estaba en el baño, una perra que estaba muy hambrienta vio la puerta abierta como una oportunidad y entró. Cuando Bill regresó un minuto después, ¡no se podía creer lo que estaba viendo! Por suerte para esta perrita abandonada, Bill adora los perros.

De hecho, en casa ya tenía tres perros que había rescatado. Sin duda este nuevo rescate necesitaba comer, así que Bill le dio todo lo que tenía: un bocadillo de Rice Krispy. Mientras Bill observaba cómo la perra devoraba la comida, se enamoró de ella. Le envió una foto a su esposa Angela, preguntándole si no había problema con llevarla a casa. Por supuesto, Angela dijo que sí.

“Le pregunté cuál era el nombre de nuestra nueva perra", le contó la esposa de Bill a The Dodo.

Los dos decidieron llamarla River (río), porque ahí fue donde la encontraron.

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Mientras Bill continuaba con su viaje, River dormía plácidamente en el asiento de copiloto. Cuando llegaron a casa, el hijo y la esposa de Bill salieron a conocer a la nueva perra. Sin embargo, River se sentía segura dentro del auto y se negaba a bajarse.

Cuando se dio cuenta de que River no se bajaría del auto por sí sola, Bill la cargó y la llevó hasta el patio trasero. Una vez que olfateó el terreno, se sintió más cómoda.

¡River por fin tenía una casa para toda la vida!

La familia Shaver le presentó a River todos los otros perros uno por uno. Estaban felices de ver que River se llevaba bien con el resto. Cuando ya se habían presentado de forma apropiada, Bill llevó a River dentro de la casa. La pobre estaba cubierta de garrapatas y tenía sangre en su cuello y en su cara. Bill la bañó.

Luego de que estuvo seca y ya le habían quitado las garrapatas, le dieron una muy buena comida. Más adelante Bill le preparó una cama cerca de la calefacción en su habitación, donde dormiría tranquilamente toda la noche.

El siguiente día, Bill pidió una cita con el veterinario para revisar las heridas que tenía en el cuello y en la cara. El veterinario les informó a Bill y a Angela que River tenía unos cuantos problemas de salud, que eran cestodos y dirofilaria immitis, y las heridas en su cara y su cuello habían surgido por una pelea.

Sin embargo, el veterinario prescribió los medicamentos apropiados, ¡y pronto River ya era una perrita sana!

Desde entonces, River ha ido creciendo y es feliz y está cómoda en su nuevo hogar. A ella y a sus hermanos perros les encanta jugar juntos y a River le encanta pasar tiempo con Bill y Angela. ¡River no tenía ni idea cuando entró en el auto de Bill de que terminaría en el mejor hogar que un perro podría desear!

Echa un vistazo a la historia en el video que está a continuación:

¡Qué historia tan encantadora! ¿Alguna vez has tenido la oportunidad de salvar a un animal? Cuéntanos en la sección de comentarios, ¡y no te olvides de compartir el amor mostrándoles esta historia a tus amigos y familiares!