Niña muere trágicamente en urgencias horas después de ponerse azul y vomitar sangre

Ene 10, 2019

La tragedia nos afecta a todos de diferentes formas. Aunque no hay manera de deshacer lo que ya está hecho, podemos utilizar la historia de lo que pasó para ayudarnos a vivir de forma más consciente de ahí en adelante.

Esta trágica historia sirve para ayudar a los padres a prevenir que ocurra cualquier accidente raro en sus hogares.

En esta historia, Brianna Florer tenía apenas dos años de vida.

Kent Vice, el abuelo de Brianna, y Stephanie y Brian Florer, los padres de Brianna, fueron todos testigos del trágico fallecimiento de su hermosa bebé durante una temporada navideña.

Vice y los Florer amaban a Brianna con todo su corazón; tanto los padres como el abuelo tenían una relación muy amorosa. Trágicamente, los eventos que desencadenaron la muerte de Brianna fueron imprevistos, pero se pudieron haber evitado.

En el 2015, la pequeña Brianna estaba celebrando la Navidad en Oklahoma. Había estado con fiebre por dos días seguidos, pero sus padres esperaban que se mejorara.

Sin embargo, su preocupación se intensificó cuando la cara de Brianna se empezó a poner azul. Cuando todos desesperadamente empezaron a buscar ayuda, se alarmaron al ver que comenzó a vomitar sangre.

A pesar de que se apresuraron en llegar al hospital, ni siquiera la cirugía de emergencia pudo salvarla. Los médicos no pudieron detener nada del sangrado interno en el esófago de Brianna.

Los médicos descubrirían después que la causa de que Brianna se enfermera y muriera había sido un pequeña batería redonda.

Lo que habría sido algo relativamente insignificante para un adulto terminó siendo determinante para Brianna. Según los médicos, es probable que se hubiera tragado la batería seis días antes de morir.

Ahora, cada Navidad, los Florer y los Vice recuerdan la hermosa niña que tanto amaron.

Siempre es bueno que los padres recuerden tener cuidado con los juguetes que les regalan a sus hijos. Aunque puede que en un principio parezcan pequeños e inofensivos, la historia de Brianna demuestra que incluso las piezas más pequeñas pueden hacer un gran daño.

Aunque es demasiado tarde para Brianna, puede que no lo sea para otros niños. Los seres queridos de Brianna están decididos a compartir su historia para ayudar a informar a los padres de los peligros de estas pequeñas baterías.

Tomarse el tiempo para transmitir la historia de Brianna podría salvar la vida de otro niño pequeño.

Leyendo una historia como esta, nos preguntamos: ¿Qué se puede hacer para evitar que algo como esto vuelva a suceder? Cuéntanos qué opinas sobre esta desgarradora historia en la sección de comentarios.

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