Momentos en los que la princesa Diana reutilizó su vestimenta real

Jul 28, 2020

La princesa Diana es recordada por muchas razones, pero su marcado sentido del estilo es una de las cosas que más salen a relucir. Su estilo ha ejercido influencia sobre muchas personas, incluyendo a sus dos nueras, Kate Middleton y Meghan Markle. Tampoco podemos dejar de mencionar la reciente sesión de fotos de Vogue Paris que protagonizó Hailey Bieber.

Lo que la hizo tan adelantada a su tiempo fue su voluntad de volver a ponerse las prendas que tenía. Eso la convirtió en una campeona de la ecología y la sostenibilidad, décadas antes de que eso se convirtiera en una tendencia. En esta ocasión te presentamos una serie de momentos en los que Diana le dio nueva vida a prendas ya usadas, reinventando su vestuario.

Al parecer, originalmente este set de zafiros saudíes estaba en un reloj. Diana extrajo esas gemas del reloj y se las colocó a una diadema típica de los años 80. Se puso la diadema para un evento que se celebró en Japón en mayo de 1986. Así nos demostró que es posible aprovechar las piedras preciosas reutilizándolas en otra prenda.

Más tarde, usó el mismo conjunto de joyas en banda como una gargantilla, y la combinó con un impresionante vestido sin tirantes. Esto es algo que también puede hacerse fácilmente con una cinta o bufanda.

Durante un almuerzo con su madrastra, Diana usó un clásico traje de pantalón gris de doble pecho, que incluía hermosos volantes en la chaqueta. Nadie se ve mal con un traje como este, porque es atemporal, y se puede usar en muchas ocasiones. Lo que hace que el traje sea más interesante es ese detalle adicional, que hizo que el atuendo fuera más reconocible para el público.

En vez de usar su traje exclusivo con menos frecuencia, Diana optó por cambiar los pantalones por una falda gris bien sencilla, dejando atrás la apariencia seria y formal para darle paso a un estilo más jovial, apto para ser usado en eventos más variados. Ten en cuenta que aunque tu blazer sea muy especial, es posible extender sus posibilidades si lo combinas con estilos diferentes en la parte de abajo.

Cuando Lady Diana Spencer todavía no se había convertido en princesa, apareció en las finales de Wimbledon de 1981 luciendo un impresionante traje de dos piezas con estampado floral. El colorido traje es una reminiscencia de la naturaleza, y brinda una imagen perfecta para los campeonatos de tenis que suelen celebrarse en verano.

Cuatro años más tarde, en 1985, Diana se puso la falda de ese traje para asistir a otro evento deportivo: un partido de polo que se disputó en Cirencester. Nos demostró que si separamos los conjuntos que ya poseemos, podemos sacarle más partido a la ropa, creando atuendos completamente nuevos que irradian frescura y modernidad.

Fue en 1987 cuando Diana se puso el vestido azul pálido de Catherine Walker por primera vez, durante una visita oficial que hizo a Lisboa, Portugal. Sus mangas largas y holgadas la hacían ver como toda una reina.

Luego le hizo modificaciones a ese vestido, quitándole las mangas y añadiéndole un escote sin tirantes en forma de corazón. Así se presentó en un baile de caridad dos años más tarde, en 1989. Esta modificación le permitió lucir dos de sus mejores atractivos: sus clavículas y sus brazos tonificados.

¿Qué te parecieron los trucos de refacción de Diana? Sin duda, son sostenibles pero a la moda. ¿Cuál es tu look favorito? Déjanos tus comentarios, y comparte esto con todos los fashionistas que conozcas.