Madre descubre que la niña que había acogido es la hermana biológica de su hijo adoptado

Mar 28, 2019

Katie Price nunca se imaginó que sería madre soltera. Pero a los treinta y tantos años, después de separarse de su marido, terminó convirtiéndose en una. Sin embargo, Katie estaba decidida a no dejar que esta circunstancia la deprimiera.

Katie compró una casa en Colorado, empezó a ejercer una nueva carrera y se convirtió en madre adoptiva. Como tenía problemas de fertilidad, nunca había podido tener hijos, así que decidió adoptar.

En 2016, un niño de apenas cuatro días de nacido fue abandonado en un hospital de la zona. La difícil situación del bebé le cambió la vida a Katie por completo.

Katie acogió al bebé como su hijo adoptivo y lo bautizó como Grayson. Casi un año después, un juez decidió retirarle a los padres biológicos de Grayson la patria potestad sobre el niño, lo que le permitió a Katie adoptarlo formalmente, cuando el bebé tenía once meses.

Katie disfrutaba al máximo el tiempo que pasaba junto al niño. También tenía planes de adoptar a otro bebé cuando se sintiera preparada. Pero cuando recibió una llamada telefónica de una trabajadora social, las cosas se salieron de control.

Otro recién nacido había sido abandonado en el mismo hospital donde Grayson fue encontrado. Esta vez se trataba de una niña.

Katie se sintió totalmente abrumada durante diez minutos y empezó a llamar a todos sus amigos y familiares para que la aconsejaran. Su instinto le dijo que tenía que adoptar a la criatura.

En cuestión de horas, Hannah entró a la casa de Katie, quien la cargó en sus brazos como una buena madre. Pero cuando Katie vio la pulsera de identificación de la niña, se quedó perpleja.

El nombre de la madre que aparecía en el brazalete de la niña era el mismo que el de Grayson. Y la fecha de nacimiento de la madre también era la misma. Todo indicaba que Hannah era la hermana menor de Grayson.

Pero Katie quería estar totalmente segura. Encontrar a la madre de Hannah se llevó su tiempo, pero el esfuerzo valió la pena. Se confirmó que la mujer había dado a luz a un niño aproximadamente un año antes de que naciera Hannah.

Además, Katie le hizo pruebas de ADN a los bebés, las cuales confirmaron que Grayson y Hannah eran medio hermanos.

Katie está muy contenta por haber seguido sus instintos, ya que ahora los hermanitos viven bajo el mismo techo y puede criarlos como si fueran sus propios hijos.

¿Crees que todo fue resultado del destino o de una mera coincidencia? ¡Comparte esta historia con tus seres queridos para alegrarles el día!