Madre de gemelos está a punto de ser echada de un avión, pero la azafata no puede ignorar a la persona que da la cara por ella

Ago 22, 2018

Una azafata intenta echar del avión a una madre de dos gemelos recién nacidos por un tecnicismo, pero alguien intervino y salvó el día.

Es positivo ver actos de humanidad en tiempos de tanta crueldad y falta de empatía. Hace poco, una madre de dos recién nacidos casi es expulsada de un avión. Si no hubiera sido por un completo desconocido que intervino, se habría visto obligada a abandonar el avión con los bebés en brazos.

Ella era la última persona que uno se imagina que pueda ser expulsada de un avión.

Normalmente, es alguien que intenta entrar en el avión borracho o con ganas de pelea. No pensarías nunca que una madre de dos recién nacidos pudiera ser el blanco en este caso, pero es posible que algunos de los pasajeros no quisieran escuchar el llanto de los bebés.

Los viajes en avión son estresantes para todo el mundo, especialmente para los recién nacidos que no entienden toda lo que ocurre a su alrededor. Los bebés la pasaron mal adaptándose al nuevo entorno temporal. Para colmo, la azafata se mostró hostil con la madre y sus bebés.

Esta se mostró extremadamente inflexible sobre algunas de las reglas y estuvo a punto de echar a la familia basándose en un tecnicismo.

La primera cosa que la azafata de vuelo hizo fue decirle a la mujer que no estaba permitido sostener a los dos bebés. Que el hacerlo suponía un problema de seguridad. La mujer quiso entonces sentar a uno de sus bebés en una sillita a su lado, pero el vuelo iba tan lleno que era imposible hacerlo. La mujer se estaba preparando para ser expulsada del avión con sus dos bebés simplemente por esa razón técnica. La azafata no tuvo ningún problema echándola del avión.

Para empeorar la cosa, parecía que nadie iba a intervenir a su favor. Como se dijo antes, posiblemente nadie quería sentarse al lado de dos bebés llorones.

Una persona mostró preocupación y empatía. Ella era también madre, así que se ofreció a sujetar a uno de los bebés durante el vuelvo entero. Esto es lo que hace la gente empática cuando ve que alguien necesita ayuda. Es esperanzador el saber que todavía hay gente así en el mundo. La mujer y sus hijos pudieron quedarse en el avión y probablemente hicieron una nueva amistad.

La moraleja de esta historia sería que es necesario dar la cara por los que lo necesitan. En vez de hacer la vista gorda o ser partícipe en el sufrimiento de alguien, más gente debería ser capaz de echar una mano al que lo necesita. Comparte esta historia conmovedora con gente de tu círculo y recuérdales el significado de la empatía y la compasión.