John Travolta dice que su baile con la princesa Diana fue "como un cuento de hadas"

Jun 06, 2022

La princesa Diana fue uno de los iconos más estimados del siglo XX. Su elegancia, su belleza y su bondad inspiraron a gente de todo el mundo. La noticia de su prematura muerte sumió al mundo en un prolongado luto colectivo.

Su influencia se sigue sintiendo hoy en día, y la gente la sigue honrando de diversas maneras. La princesa Diana dejó una huella muy duradera, ya sea a través de su obra benéfica o de su prestigioso legado.

En los corazones del público siempre perdurará el recuerdo de aquella mágica noche de 1985 en la que la princesa Diana y John Travolta protagonizaron un baile en la Casa Blanca. Vestidos de punta en blanco, las dos celebridades formaron una pareja impresionante y se deslizaron con gracia por la pista de baile. Las fotos de aquella noche siguen conmoviendo al público, aunque hayan pasado más de 35 años.

Ese momento fue realmente maravilloso, porque nos dio la oportunidad de ver a "la princesa del pueblo" bailando con mucha gracia y despreocupación. Además, Travolta, que era un verdadero galán y una fulgurante estrella de Hollywood, era bien conocido por sus habilidades en la pista de baile, lo que dio como resultado un momento único e inigualable. Al fin y al cabo, no hay muchos galanes de Hollywood que se hayan podido dar el lujo de bailar con una princesa.

Esa noche también dejó una marca indeleble en la vida del actor. En una entrevista que Travolta le concedió a Esquire España, el intérprete habló sobre lo especial que fue esa noche. En la entrevista también habló Pete Souza, el hombre que estuvo detrás de esa famosa foto. Souza ofreció su propio comentario sobre esa gala excepcional.

Aquella noche de 1985, durante una visita a Estados Unidos para ver al entonces presidente Ronald Reagan y a la primera dama Nancy Reagan, la princesa Diana tuvo la oportunidad de bailar con un tremendo galán, John Travolta. La estrella de "Fiebre del sábado por la noche" y "Grease" se había ganado la reputación de ser uno de los mejores bailarines de la escena cinematográfica. En aquel baile en la Casa Blanca, la pareja fue fotografiada bailando, y la imagen se convirtió en toda una leyenda.

Parecía que ambos estaban en las nubes, y las fotos muestran al talentoso intérprete soltando a la elegante princesa en un giro, durante un vals. En aquella época, las revistas de moda y los editores de belleza de todo el mundo deliraban con la inmaculada perfección del vestido que llevaba la princesa británica. Era de un rico terciopelo azul, tan oscuro que casi parecía negro. Tenía la silueta clásica del viejo Hollywood, con un diseño sin hombros que se consideraba bastante atrevido para un miembro de la realeza en aquella época.

Los trajes y los vestidos también pueden marcar momentos cruciales en la historia y la cultura de una sociedad. Por ejemplo, nadie olvida el icónico vestido blanco que lució Marilyn Monroe en "La comezón del séptimo año". Con el paso de las décadas, esas prendas suelen terminar en los museos, como fue el caso de las zapatillas rojo rubí de Dorothy en "El mago de Oz", que actualmente se exponen en el Instituto Smithsoniano. El vestido que llevó Diana durante el baile con Travolta tuvo un destino similar.

"El protocolo real exigía que se vistiera de forma muy recatada", explicó Lucy Bishop, experta en moda vintage y profesional de una casa de subastas, según el Daily Mail. "Fue una elección muy audaz y madura para una princesa tan joven".

Actualmente, el vestido diseñado por Victor Edelstein parece casi recatado y conservador, lo que demuestra lo mucho que hemos avanzado en tan poco tiempo. La misma Diana vendió la prenda en 1997 y donó el dinero de la venta a organizaciones benéficas que luchan contra el sida. Desgraciadamente, Diana murió solo dos meses después.

El vestido se volvió a subastar en 2020 y fue vendido por 352.000 dólares. Según The Independent, la icónica pieza fue comprada por Historic Royal Palaces, una organización benéfica con sede en el Reino Unido que administra los palacios que ya no están ocupados.

"Estamos encantados de haber adquirido este icónico vestido de noche para nuestra colección de trajes de gala reales, una colección designada como de importancia nacional e internacional, más de 20 años después de que salió por primera vez del palacio de Kensington", le explicó Eleri Lynn, curadora de la organización benéfica, al Independent.

Eso es lo bonito de la moda: no es solo una cápsula del tiempo de determinados periodos de la historia, sino que las prendas que se usan en ocasiones especiales como esta terminan adquiriendo vida propia. Diana se veía sencillamente impresionante con ese vestido, y los acontecimientos que tuvieron lugar esa noche hicieron que la prenda fuese aún más especial.

Durante los escasos 30 minutos que duró aquel baile de noviembre, Travolta y la princesa Diana se convirtieron en las estrellas de la pista de baile, demostrando que tenían buenos motivos para haberse convertido en grandes celebridades. Gracias a la foto, nos quedó claro que ambos eran el epítome de la clase y la elegancia, porque se movían por la pista ajedrezada como si estuvieran flotando.

En abril de 2021, Travolta habló con Esquire España sobre ese momento tan especial, según la traducción de Today. El actor le dijo a la revista:

"Pensemos un poco en ese momento. Estábamos en la Casa Blanca, a la medianoche. Toda la escena era como un sueño. Me acerco a ella, la toco por el hombro y la invito a bailar. Ella se voltea y, al verme, muestra esa sonrisa cautivadora, aunque levemente apenada, y acepta mi invitación".

Continuó explicando lo que era fácil y lo que era difícil:

"Para hacer algo como eso, uno debe haber una buena razón, y más vale que lo des todo... Tenías que guiar bien el baile, y tratar de que fuera divertido. Esa era la parte fácil, pero presentarme ante Diana de la forma adecuada, transmitirle confianza y pedirle que fuera mi pareja de baile fue una misión complicada".

Sin embargo, en términos generales el actor describió la experiencia como un "gran privilegio y un honor".

"Allí estábamos, bailando juntos como en un cuento de hadas. ¿Cómo me iba a imaginar que un día me podía pasar algo así? Fui lo suficientemente inteligente como para guardarlo en mi memoria, como un momento muy mágico y especial".

Ciertamente fue un momento importante, no solo para ellos dos, sino para todo el mundo. La princesa Diana, que para entonces tenía 24 años, estaba en la cima de su fama: estaba casada con el príncipe Carlos, heredero de la monarquía británica, y apenas un año antes había dado a luz al príncipe Harry, su segundo hijo. El acto en la Casa Blanca fue en honor al primer viaje juntos del príncipe y la princesa de Gales a Estados Unidos.

Pero sin las fotos icónicas que se tomaron esa noche, no podríamos tenerla en la memoria. El hombre que está detrás de esas imágenes no es otro que Pete Souza, antiguo fotógrafo oficial de la Casa Blanca. Tras la entrevista de Travolta, el afamado fotógrafo también habló sobre sus propios recuerdos de esa noche, a través de su cuenta personal en Instagram. Junto a la foto, escribió lo siguiente:

"Tomé esta fotografía hace más de 35 años, pero recuerdo el momento como si fuera ayer. Y parece que John Travolta también lo recuerda".

A continuación, Souza ofreció su propia visión sobre esa noche.

"La ocasión fue una cena de etiqueta en la Casa Blanca, el 9 de noviembre de 1985, en honor del príncipe Carlos y la princesa Diana. A menudo se la denomina 'cena de Estado', pero como el príncipe Carlos no era un jefe de Estado, no era en realidad una cena de Estado, aunque ciertamente tenía todas las formalidades de una".

Terminó su publicación ofreciendo algunos datos poco conocidos sobre esa noche, como que mientras bailaban, "la banda militar tocaba un popurrí de canciones de la película de Travolta 'Fiebre del sábado por la noche'". Souza dio más detalles jugosos sobre esa noche, y mencionó otras parejas de baile que tuvo Diana, como el presidente Reagan, Tom Selleck, Neil Diamond y Clint Eastwood, pero una notable ausencia en la lista fue la de su marido. Souza escribió de forma explícita: "Pero no bailó con el príncipe Carlos".

Claramente, ese momento nos ha afectado a muchos de nosotros, no solo a los que estuvieron presentes en esa gala. Aunque la princesa Diana se haya ido de este mundo, podemos seguir manteniéndola en la memoria, reflexionando sobre momentos como este, en los que nos asombró con su pureza, su elegancia y su carisma.

¿Te conmovieron los recuerdos de John Travolta sobre aquella noche? Si te gustan los cuentos de hadas, esta historia te hará ver que también pueden suceder en la vida real. Muéstrales esta historia a todos los que disfruten ver a dos estrellas compartiendo momentos mágicos.