Fascinante parecido: la hija de Angela Lansbury es la viva imagen de su madre

Sep 08, 2021

A lo largo de los años, Hollywood ha visto surgir a numerosas actrices que se han vuelto icónicas. Las más destacadas tuvieron carreras que duraron varias décadas y por lo general desarrollaron un amplio abanico de papeles, o cimentaron su abrumador talento especializándose en un género en particular.

Una de esas mujeres es Angela Lansbury, actriz británica-estadounidense que se hizo famosa por sus numerosos papeles en teatro, cine y televisión. Su carrera en el mundo del espectáculo tiene casi 80 años, y en octubre de 2021 la intérprete cumplirá 96 años. Angela está considerada como una de las últimas estrellas que quedan de la Edad de Oro de Hollywood.

Es más conocida por sus papeles en "The Manchurian Candidate", "Mame", "Travesuras de una bruja" y "La reportera del crimen". Angela también ha prestado su voz en populares películas de animación, como "La bella y la bestia" y "Anastasia".

Ha recibido muchos premios a lo largo de su dilatada trayectoria, incluyendo un Premio Honorífico de la Academia y un Premio a la Trayectoria de la BAFTA. Además, ha ganado cinco Premios Tony, seis Globos de Oro y un Premio Olivier, entre otras muchas distinciones.

Pero además de su carrera estelar, Angela también ha tenido una rica vida personal. En 1949 se casó con el amor de su vida, Peter Shaw, con quien tuvo dos hijos. Su hijo Anthony y su hija Deirdre se criaron en Estados Unidos, pero posteriormente se mudaron a Irlanda con sus padres, tras pasar por algunos problemas personales. Ahora que todas esas dificultades han quedado atrás, la familia Lansbury es muy feliz. ¡Y los fans han notado lo mucho que Deirdre se parece a Angela!

Angela Lansbury nació en el seno de una familia de clase media alta del centro de Londres, el 16 de octubre de 1925. Su madre era la actriz Moyna Macgill, y su padre fue el político y comerciante de madera Edgar Lansbury. El padre de Angela falleció de cáncer de estómago cuando ella tenía 9 años, y la actriz ha dicho que la actuación la ayudó a sobrellevar ese dolor.

Su madre tenía problemas económicos, y cuando se comprometió con otro hombre, ambas se mudaron con él a Hampstead. Angela siguió educándose a través de libros, películas y obras de teatro. La joven también aprendió a tocar piano y estudió música en la Escuela de Baile Ritman. En 1940 empezó a estudiar interpretación en la Escuela de Canto y Arte Dramático Webber Douglas.

En 1940, cuando empezaron los bombardeos sobre Londres, la madre de Angela decidió trasladar a su familia a Estados Unidos. Una vez allí, Angela recibió una beca de la American Theatre Wing, que le permitió estudiar en la Feagin School of Dramatic Radio and Arts. Su familia volvió a mudarse en marzo de 1942, después de graduarse en la escuela, esta vez a Greenwich Village. Actriz de toda la vida, Angela llegó a decir lo siguiente:

"Cuando era niña, quería que la gente se fijara en mí. Recuerdo que a los 11 o 12 años, cuando me sentaba en los autobuses, siempre trataba de parecer interesante. A veces llamaba la atención de la gente diciendo cosas un poco extravagantes, para sonar como si yo supiera algo que ellos no sabían".

Añadió:

"No tuve adolescencia. Siempre estuve demasiado ocupada, preparándome para convertirme en actriz. Nunca se me ocurrió no perseguir mis sueños, ni por un segundo. Ni siquiera se me pasó por la cabeza que me estaba perdiendo de algo".

Angela comenzó su carrera actoral a los 17 años, cuando repentinamente pasó de trabajar en el mostrador de cosméticos de unos almacenes a firmar un contrato con los estudios MGM. La MGM estaba buscando jóvenes actrices británicas para llenar su lista, y Angela encajaba perfectamente con los requisitos.

Consiguió su primer papel importante poco después de firmar con la MGM, en la película de 1944 "Gaslight", protagonizada por grandes estrellas de Hollywood, como Ingrid Bergman y Charles Boyer. Sorprendentemente, este primer papel histórico le valió a la para entonces novata actriz una nominación al Oscar a la mejor actriz de reparto, lo que lanzó su carrera a la cima de la noche a la mañana.

A esa primera nominación al Oscar le siguió, muy poco después, una segunda nominación también a la mejor actriz de reparto, por la película "El retrato de Dorian Gray". Sin embargo, durante este tiempo, la mayoría de sus papeles eran secundarios ya que Angela tenía un contrato con la MGM, lo que hizo que se sintiera cada vez más insatisfecha. Expresó ese descontento en 2017, durante una entrevista que le concedió a Vanity Fair:

"Para la MGM, yo era una actriz de utilería. Podían ponerme en casi cualquier papel, y querían que yo lo interpretara sin más".

A menudo, la joven actriz interpretaba el papel de una mujer de mediana edad, a pesar de ser 20 años más joven que los personajes que interpretaba. La forma en que la MGM la trataba hizo que se sintiera infravalorada en cuanto a su carrera y sus habilidades. Ella explicó ese malestar en la misma entrevista:

"La MGM no tenía ni idea de cómo poner en uso mi talento. Yo estaba loca por irme, porque sentía que no iba a llegar a ninguna parte".

Finalmente canceló su contrato con la MGM en 1952 y dejó de lado la actuación por un tiempo, para concentrarse en su creciente familia.

Mientras descansaba de la actuación, Angela se dedicó a enriquecer su vida personal. En 1949 se casó con el actor y productor Peter Shaw, aunque en realidad era su segundo matrimonio. Su primer matrimonio fue en 1945, con el actor Richard Cromwell. En ese entonces Angela tenía apenas 19 años, y su marido 35. Sin embargo, se divorciaron apenas un año después, en 1946. Siguieron siendo amigos íntimos a pesar de todo, hasta que Cromwell murió de cáncer de hígado en 1960. Pero su segundo matrimonio resultó ser el más importante de su vida. Peter ya tenía un hijo de su primer matrimonio, David Shaw, y Angela lo acogió como si fuera su propio hijo. David llegó a decir:

"Es una gran señora. Entré en su vida, y ella no tenía que aceptarme. Pero fue algo increíble. Ella siempre pone a la familia en primer lugar".

Angela y su marido tenían planes de tener más hijos, así que en 1952 (más o menos cuando dejó la MGM) trajo al mundo a su hijo Anthony Pullen Shaw, y un año después tuvo una hija llamada Deirdre Angela Shaw. Para Angela, su familia siempre ha sido extremadamente importante. Cuando estaba trabajando como actriz, sabía que sus hijos estaban en buenas manos con su marido. En una entrevista de 2012, Angela señaló:

"A Peter tengo que darle el mérito por muchas cosas, cosas que probablemente yo no hubiera hecho si me hubieran dejado a cargo. Él me decía: 'Anda a hacer tus cosas, que yo me ocupo de todo aquí. Ve'. Y siempre le agradecí que lo hiciera".

Tan fuerte era el amor de la pareja, que cuando Peter murió en 2003, después de 53 años de casados, Angela se lo tomó muy mal. En la misma entrevista de 2012 expresó su dolor.

"Eso no es lo que uno espera. Nunca se te ocurre que eso pueda ocurrir, hasta que de repente ocurre, y esa persona especial se va".

Aunque Angela estaba muy contenta de formar una familia con el amor de su vida, su pasión por la actuación no había disminuido. Finalmente, a mediados de la década de 1950, regresó a Hollywood como actriz independiente. Pero de nuevo se vio encasillada en papeles de mujeres mayores, que solían ser villanas o personajes antagónicos. Llegó a quejarse de la situación, diciendo que "Hollywood me envejeció antes de tiempo".

Pero su suerte y su carrera cambiaron en 1957, cuando debutó en Broadway. Utilizando las habilidades que había aprendido en los inicios de su carrera, se dedicó de lleno a interpretar personajes maduros, pero dándoles un giro propio. Esto le permitió ganar el papel de la Sra. Iselin en la película "El candidato de Manchuria" en 1962, a pesar de ser solo tres años mayor que el actor que hacía el papel de su hijo en ese momento. Gracias a ese trabajo, Angela ganó su tercera nominación al Oscar.

Luego, en 1966, su carrera dio un nuevo giro: conquistó Broadway al interpretar el personaje protagónico en la exitosa comedia musical "Mame", lo que supuso un alivio para ella, ya que temía que la encasillaran para siempre en papeles maternales. La lista de sus triunfos en Broadway es larga y variada: desde Mamá Rose en "Gypsy" hasta la Sra. Lovett, la viuda asesina de "Sweeney Todd", Angela siempre le ha dado al público de Broadway algo especial y sigue siendo fiel a ese escenario hasta el día de hoy.

A medida que el estrellato de Angela seguía aumentando, empezó a tomar las riendas de numerosas películas que rápidamente se convirtieron en las favoritas de los fans. Uno de esos papeles fue en el filme "Travesuras de una bruja", una película de Disney que presentaba música muy divertida y efectos de animación de vanguardia. Igualmente memorable fue su participación en "La bella y la bestia" de 1991, donde le dio voz a la encantadora Sra. Potts. Ese personaje le permitió lucir su gran talento vocal como cantante.

Con una carrera tan larga, no es de extrañar que Angela tuviera otro momento importante. Ocurrió cuando dio el salto a la televisión, a principios de los 80, encarnando a Jessica Fletcher en el drama de la CBS "Murder, She Wrote" ("La reportera del crimen"). Interpretó a una discreta escritora de novelas de misterio que tenía un don para resolver casos de asesinato muy difíciles. Este personaje se convirtió rápidamente en uno de los más reconocibles y queridos de su carrera. La serie se mantuvo al aire por 12 años, debutando en 1984 y terminando en 1996.

Su papel en ese programa está considerado como el más popular. Curiosamente, este rol tan característico estuvo a punto de no ver la luz, ya que iba en contra de las recomendaciones de su agente, que se decantó por el papel principal de una comedia de situación que le ofrecieron al mismo tiempo. Pero Angela prefirió aceptar el papel que más le apetecía... ¡Y menos mal que lo hizo! Ese personaje le granjeó un gran reconocimiento y contribuyó a cimentar su condición de icono en la mente de una nueva generación de telespectadores, además de reavivar el interés entre sus fans de toda la vida. Además, recibió numerosas nominaciones a premios por ese papel, como los Primetime Emmy, los Globos de Oro y los SAG.

Angela aceptó ese trabajo cuando ya tenía 60 años, una edad que muchos en Hollywood consideran "agotada". Pero muy por el contrario, esa madurez la convirtió en una verdadera máquina en la industria del entretenimiento y muchos llegaron a considerarla como la mujer más poderosa de la televisión para aquel momento. Buscando que el carácter de su personaje se mantuviera fuerte y sólido, Angela presionó para que se hicieran ciertos cambios en el guion si consideraba que el personaje no estaba a la altura. Varios miembros de la familia de Angela, como su marido y su hijo, también trabajaron en la serie. Ella siguió interpretando ese papel con la misma pasión y el mismo carisma, tras haber pasado largamente los 70 años.

A pesar de sus éxitos en la actuación, la vida personal de Angela pasó por un periodo problemático. Tanto ella como su marido tuvieron que tomar la difícil decisión de alejar a su familia de los Estados Unidos porque sus dos hijos, Anthony y Deirdre, se enredaron fuertemente con las drogas a finales de la década de 1960. Deirdre también se vio involucrada con la infame familia de Charles Manson. Angela rememoró esos difíciles momentos: "Empezó con la marihuana, pero después pasó a la heroína. Me duele decirlo, pero Deirdre se metió en un grupo dirigido por Manson".

A raíz de esa situación, toda la familia se trasladó a Irlanda para empezar desde cero. Angela comentó:

"Teníamos que alejarnos de California, y de toda esa vida llena de drogas. Cuando llegamos a Irlanda, fue como si hubiéramos empezado una nueva vida. Eso nos dio el tiempo que necesitábamos para volver a pisar tierra. Compré una casa en Cork, empezamos a trabajar en el jardín, y aprendí a cocinar. Cociné por primera vez en mi vida, usando ingredientes de mi propio huerto. En fin, empezamos una vida totalmente nueva".

La mudanza terminó siendo justo lo que Anthony y Deirdre necesitaban. Angela compartió sus impresiones:

"Anthony abandonó sus malos hábitos rápidamente. A Deirdre le costó un poco más, pero al final se casó, y ahora regenta un restaurante italiano en Los Ángeles, junto a su marido".

Deirdre está casada con el chef italiano Enzo Battarra, y ambos son los felices dueños de un próspero restaurante. Ahora que Deirdre ha crecido, su parecido con su madre nos resulta increíble. ¡Parecen dos fotocopias! Y lo mejor es que tanto Ángela como Deirdre siguen siendo increíblemente bellas.

¿Crees que Angela Lansbury y su hija Deirdre se parecen mucho? ¿Eres fan del trabajo actoral de Angela? Déjanos tus comentarios y envíales esto a tus amigos y familiares, para que también lo vean.