Extendió sus brazos para abrazar al bebé elefante, pero recibió más de lo que esperaba
May 16, 2020
Vivian y Arthur estaban visitando la Patara Elephant Farm, ubicada en Chiang Mai, Tailandia. Allí conocieron a Tara, una cría de elefante asiático de dos meses de edad. Estaban preparados para pasar el día con Tara, pero no tenían idea de que uno de ellos iba a recibir un gran abrazo de elefante.
La Patara Elephant Farm, ubicada en Chiang Mai, Tailandia, es una granja refugio que funciona como reserva para los elefantes. Allí son cuidados y protegidos en todo momento. La organización también ofrece un programa llamado "Dueño de elefante por un día", que les brinda a los huéspedes de la granja una "experiencia práctica en en las responsabilidades que implica cuidar a un elefante". Tal como lo describen en su sitio web, el programa busca convertirse en "una actividad significativa mediante la cual se pueda crear una relación de confianza entre los elefantes y los visitantes".
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Vivian y Arthur decidieron vivir la experiencia de ser "dueños de un elefante por un día". Estaban muy ansiosos por conocer al elefante en cuestión. Terminaron acompañando a Tara, una cría de elefante asiático de dos meses de edad. Vivian grabó sus interacciones con la cría de elefante, y subió algunas escenas a su canal de YouTube, donde también explicó por qué habían elegido visitar la Patara Elephant Farm:
"A diferencia de lo que ocurre en otros parques de elefantes de Chiang Mai, los propietarios y el personal de Patara se enfocan exclusivamente en la atención sanitaria y en el cuidado de las crías de esta especie en peligro de extinción. Ayudan a los elefantes que han resultado heridos por las minas terrestres. Allí los turistas ocupan un lugar secundario".
Durante su día como dueños de elefantes, Vivian y Arthur entendieron lo que implica cuidar a estos gigantes. Entre otras cosas, aprendieron a acercarse a la cría, bañarla y alimentarla.
Poco antes de que terminara el día, Arthur abrió los brazos para que Tara supiera que podía darle un abrazo. La "pequeña" Tara estaba más que entusiasmada cuando vio al hombre, y se le acercó con confianza.
La cría se arrojó a los brazos de Arthur, tanto que él no pudo mantener el equilibrio y se cayó. Pero eso no es de extrañar, porque las crías de elefante pueden pesar de 90 a 120 kilos.
Sin embargo, el hecho de que Arthur se cayera no impidió que Tara se le subiera encima, esperando que él la consintiera. En vez de alejarse de la bebé, Arthur le dio exactamente lo que ella quería: ¡más abrazos!
Cuando el hombre estaba a punto de levantarse, Tara lo tiró al piso una vez más, poniendo todo su peso sobre él. Era obvio que la elefantita estaba disfrutando mucho de sus abrazos. Pero en cuanto se sintió satisfecha, dejó que Arthur se pusiera de pie, y él la acarició un poco más, con mucha suavidad.
Vivian subió el video de la dulce interacción a YouTube, donde ha recibido 21.3 millones de visitas hasta la fecha. No nos sorprende para nada, porque es una escena demasiado adorable.
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