Esta bebecita prematura y abandonada fue adoptada por la enfermera que la cuidaba

Nov 09, 2021

Esta bebé tuvo un difícil comienzo en la vida, pero se ganó la lotería al ser adoptada por una de las enfermeras que la cuidaban. Gisele nació prematuramente en 2016, pesando menos de un kilogramo. Nació de padres con problemas de drogas y fue transferida al Hospital Franciscano Infantil de Boston (Estados Unidos), en octubre de ese año.

Allí, Gisele pasó meses en la sala de cuidados neonatales, sin recibir visitas ni tener a nadie que le pudiera manifestar al menos sus buenos deseos. El personal del hospital cuidó mucho a la niña, hasta que se la presentaron a la enfermera Liz Smith.

Smith siempre había soñado con ser madre, pero no era una candidata idónea para la fecundación in vitro. Rápidamente, la enfermera desarrolló una fuerte conexión con Gisele. Legalmente, los padres de la niña seguían siendo sus cuidadores para ese momento. Sin embargo, un juez les retiró esos derechos poco después y no apelaron el fallo para tratar de recuperar a la pequeña, ya que ambos tenían problemas de drogadicción.

Fue entonces cuando Smith entendió que su contacto con Gisele era cosa del destino. A medida que la niña crecía y se volvía más sana, fue quedando claro que su relación con la enfermera había tenido un enorme impacto en su vida.

Liz Smith acogió a Gisele, y finalmente logró adoptarla en octubre de 2018. ¡Ese día Liz logró cumplir su propósito de ser madre!

Hoy en día, Gisele sigue creciendo fuerte y sana. Su entusiasmo por la vida es evidente. En 2019, madre e hija se veían muy felices mientras conversaban con los medios de comunicación para ofrecer una actualización sobre su historia. ¡Vamos a echarle un vistazo!

Mientras cuidaba a Gisele en el hospital, Liz Smith fue desarrollando un fuerte vínculo con la bebé.

"Desde el momento en que la vi, sus llamativos ojos azules se robaron toda mi atención", le contó Smith a The Washington Post. "Sentí que tenía que amar y proteger a esta niña".

Como siempre había querido ser madre, a Liz se le rompió el corazón cuando le dijeron que no era una candidata idónea para la fecundación in vitro. Sin embargo, conoció a Gisele el mismo día que recibió esa mala noticia. Según el sitio web del Hospital Infantil Franciscano, Smith declaró lo siguiente:

"Todos los días iba a verla. Para mí, la bebé era como una especie de recompensa después de cumplir con un largo día de trabajo".

En ese momento, los padres biológicos de Gisele seguían siendo legalmente sus representantes, pero como estaban lidiando con problemas de adicción, las autoridades los consideraron incapaces de cuidar a la bebé, y el estado asumió su custodia. Fue entonces cuando Smith intervino, y con el apoyo de sus amistades, empezó a acoger a Gisele.

En aquel momento, Gisele no tenía buena salud y seguía alimentándose a través de una sonda, tal como señala Inside Edition. Además, el sitio web del hospital infantil afirma que su pronóstico neurológico era incierto, y también presentaba retrasos en el desarrollo. Eso significaba que lo ideal era que la enfermera Smith pudiera cuidarla, ya que todavía necesitaba mucha atención médica. Con todo el amor y el cuidado de la enfermera, Gisele empezó a crecer más fuerte y sana.

Cuando Smith empezó a acoger a Gisele, el objetivo era que la bebé pudiera volver con sus padres biológicos. Pero con el paso del tiempo, los padres fueron dejando de visitarla, y el nuevo objetivo pasó a ser la adopción, "debido a la falta de vinculación de los padres", tal como lo asegura el hospital.

Smith recuerda:

"Hay una noche en particular que se me viene a la memoria. La bebé estaba conectada a la alimentación y yo pasaba junto al espejo, y la idea de perderla se me pasaba por la cabeza. Tenía que pensar en esa posibilidad real, pero al hacerlo se me revolvía el estómago. Uno no puede amar solo en un determinado porcentaje. Cuando amas, tienes que darlo todo".

Cuando la llamaron para decirle que los padres de Gisele no habían apelado al retiro de sus derechos, y que ningún otro pariente biológico era apto para acogerla, Liz tuvo sentimientos encontrados. Según el sitio web del hospital, ella dijo lo siguiente:

"Cuando recibí la llamada de que los derechos de los padres se habían extinguido, al principio pensé que sentiría mucho alivio. Pero en realidad me sentí muy triste. Me alegré mucho, pero me sentí muy triste por ellos. Yo la estaba ganando, pero ellos la perdían. Es imposible ser madre y luchar contra la adicción al mismo tiempo".

La adopción de Gisele se completó en octubre de 2018, en el juzgado de Brockton. El juez que presidía el caso señaló que parir es un milagro, pero adoptar es cosa del destino. Las palabras del juez resumen plenamente lo que sintió Smith cuando recibió a Gisele en el seno de su familia. Mientras hablaba con los periodistas de Inside Edition, Smith confesó que, para ella, su encuentro con Gisele en el hospital fue cosa del destino.

Desde entonces, la historia de Liz y Gisele ha tocado los corazones de mucha gente, y ambas han aparecido en CNN y en el programa "The Today Show" de la NBC. En 2019, cuando le preguntaron cómo estaba Gisele, Smith le dijo a CNN que la niña estaba mejorando y que los médicos estaban asombrados por su progreso, a pesar de haber tenido un comienzo tan difícil en la vida.

¿Qué te parece la historia de Liz y Gisele? ¿Conoces alguna historia de adopción que sea tan conmovedora como ésta? Comparte este artículo, para que todos conozcan esta maravillosa historia.