Era demasiado sociable para ser perro policía, así que le dieron un trabajo mucho mejor
Mar 03, 2019
¿Alguna vez has sentido que no encajabas bien en un puesto de trabajo? ¿Sentías que por mucho que te esforzabas, tu personalidad simplemente no iba con ese cargo? Eso le pasó a un cachorro llamado Martillo.
Este cachorrito de pastor alemán fue reclutado para trabajar con la policía australiana. Como perro policía tenía muchas responsabilidades, y estaba muy ansioso por aprender su nuevo oficio.
Martillo era un cachorro entusiasta y vivaz, siempre deseoso de hacer nuevos amigos y de brindarle su alegría a todos.
Muchos piensan que los perros se parecen a sus dueños, sobre todo en cuanto a personalidad. Los oficiales de policía (especialmente mientras están de servicio) suelen tener un carácter algo serio y rudo, para inspirar respeto y sobriedad.
Este comportamiento típico de los policías encaja perfectamente con su trabajo, que consiste en arrestar a los criminales y mantener la seguridad pública. Pero Martillo parecía ser un perro amigable y alegre por naturaleza.
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Según la BBC, Martillo empezó a perder todo el interés en su trabajo de perro policía, y muchos llegaron a decir que estaba deprimido. El perro quería jugar con todo el mundo, y ese tipo de comportamiento no era lo que se esperaba de él.
Los agentes de policía no querían abandonar a Martillo, pero sabían que el perro no iba a poder ser un buen oficial, pues no estaba contento con su trabajo.
Tampoco querían reprimir su alegre personalidad, porque era un perro realmente adorable.
Ahora Martillo vive en la residencia oficial del gobernador del estado de Queensland. Su nuevo título es "Perro Virreinal" y ahora es libre de ser tan alegre y enérgico como quiera.
Pasa sus días asistiendo a eventos políticos, dándole la bienvenida a los visitantes a la Casa de Gobierno, y siendo adorado por todos en sus cuentas de redes sociales, donde personas de todo el mundo pueden revisar sus fotos.
Incluso tiene un escudo ceremonial oficial, que incluye su nombre justo al lado del escudo de armas del estado (es su tercer escudo, pues ya ha superado los dos primeros).
Básicamente, Martillo simplemente quería tener una vida sencilla y feliz, y no tener que luchar contra el crimen. ¿No te parece increíble que nuestras mascotas realmente tengan personalidades tan particulares como las de los seres humanos? La próxima vez que tengas un mal día en el trabajo, recuerda que si Martillo pudo encontrar el trabajo perfecto, tú también puedes. ¡Comparte el video para difundir el mensaje!
¿Qué opinas del nuevo empleo que recibió este perro? ¿Tienes una mascota que sea demasiado amigable también? Déjanos saber tu opinión en la sección de comentarios.