El conmovedor momento en el que la novia camina al altar con el hombre que recibió el corazón de su difunto padre

Nov 04, 2021

Uno de los momentos más conmovedores de una boda es cuando el padre de la novia lleva a su hija al altar. Significa que ha crecido y ha formado su propia familia, sin dejar de mostrar el amor y el cariño que siente por el hombre que la ha criado. Lamentablemente, no todas las novias tienen la oportunidad de vivir este momento, por lo que suelen llevar algo que les recuerde a su padre para tenerlo o sujetarlo durante la boda y asegurarse de seguir sintiendo su presencia.

Para Jeni Stepien, de 33 años, sabía que el corazón de su padre estaba con ella en su boda en Swissvale, Pensilvania, Estados Unidos, en agosto de 2016. Su padre se llamaba Michael Stepien, y murió en 2006 tras recibir un disparo de un adolescente. La familia decidió donar los órganos de Michael para ayudar a darle una segunda oportunidad de vida a alguien que necesitara un trasplante.

Arthur Thomas, un hombre de 72 años de Nueva Jersey, necesitaba desesperadamente un nuevo corazón, y recibió el de Michael tras su muerte. El hombre se mantuvo en contacto con la familia Stepien e incluso les enviaba flores en el cumpleaños de Michael cada año.

En agosto de 2016, Thomas recibió una carta de Jeni en la que le preguntaba si la acompañaría al altar en su boda. Jeni pudo por fin volver a sentir el latido de su difunto padre gracias al hombre que recibió su corazón trasplantado una década antes. Sigue leyendo para saber más sobre esta conmovedora historia.

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En 2006, Jeni perdió a su padre tras recibir un disparo de un joven de 16 años, según el New York Post. La familia decidió donar sus órganos, con lo que Thomas recibió su corazón trasplantado. "Yo estaba en la puerta de la muerte cuando lo asesinaron, y necesitaba un corazón o iba a morir en los próximos días", dijo Thomas.

Thomas se mantuvo en contacto con la familia Stepien tras la muerte de Michael y se sintió increíblemente conmovido cuando Jeni le pidió que la acompañara al altar en su boda. Se iba a casar con un hombre de 34 años llamado Paul Maenner. Thomas explicó: "Jeni me escribió una carta y me dijo: 'Querido Tom, soy la hija del hombre cuyo corazón está dentro de ti. Y... ¿me acompañarías al altar?".

Joanne Maenner, la suegra de Jeni, contó: "Se trataba de tener el corazón de su padre, como en todas las familias. Se casó con el hombre de sus sueños, y tener el corazón de su padre allí al mismo tiempo que conocer al hombre que lo recibió, cara a cara, simplemente la completó".

Justo antes de dar el "sí, quiero", Jeni puso su mano en el pecho de Thomas para sentir los latidos de su padre, según el New York Post. "¡Fue realmente el mejor día de TODA MI VIDA!", exclamó Jeni. "Poder traer a mi padre a casa y tenerlo en mi boda fue un sueño absoluto hecho realidad". Aunque el padre de Jeni no pudo estar en su boda, está claro que su presencia y su corazón se siguieron sintiendo, e hicieron que el día fuera tan hermoso como podría haber sido para los recién casados.

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