Comunidad online brinda apoyo a padres de una bebé que fue golpeada por una pelota de sóftbol mientras publican cómo sigue

Jun 21, 2018

Lee y Kassy Hovenga ansiaban crear nuevos recuerdos con su hija recién nacida, McKenna. Por esta razón estaban muy emocionados por llevarla a su primer juego de sóftbol. Esta era una gran salida para la pequeña McKenna, ya que apenas tenía siete semanas de edad. De hecho, a excepción de algunas salidas pequeñas a algunas tiendas, esta era su verdadera primera salida pública.

Con el bolso de los pañales listo y todo preparado, Kassy se ilusionó con cargar a su hija en sus brazos durante el juego, disfrutando juntos la tarde afuera.

Pero la ilusión de Kassy nunca se hizo realidad. En cambio, Kassy y Lee atravesaron una situación increíblemente devastadora con su hija recién nacida. Mientras Kassy y Lee estaban preparando a McKenna para que lactara, desafortunadamente una pelota venía acercándose. La multitud trató de advertirlos, pero los nuevos padres no la vieron venir, pues estaban ocupados envolviendo a McKenna en su manta de lactancia. En el caos de esos pocos segundos, Kassy sintió la pelota en su cálido brazo. Y más allá de eso, escuchó a su hija llorar.

Y mientras veían a su histérica hija recién nacida, Kassy y Lee estaban muy sorprendidos por el enorme chichón en su cabeza. Rápidamente ambos llevaron a su amada hija al hospital más cercano. Debido a que residen en un pequeño pueblo (Shell Rock, Iowa), tuvieron que moverse rápidamente hacia el Waverly Health Center, en un pueblo cercano. Sin embargo, los médicos no pudieron atender a McKenna y la enviaron a la Mayo Clinic.

Angustiados e incrédulos, a Lee y Kassy les informaron que su hija recién nacida tenía una fractura de cráneo y una hemorragia en el cerebro. McKenna estaba convulsionando y necesitaba de constante cuidado en aquel momento. Todo lo que podían hacer Lee y Kassy en ese punto era orar y orar, y eso hicieron.

Y lentamente la pareja empezó a escuchar buenas noticias. McKenna estaba empezando a recuperar conciencia gradualmente y comenzó a pasar mucho tiempo durmiendo. Estos eran buenos síntomas. Sin embargo, la pequeña seguía convulsionando varias veces al día.

De nuevo, tanto Lee como Kassy sabían que tenían que orar. Saber que otros también oraban podría ser beneficioso, por lo que crearon una página en Facebook llamada Healing for McKenna (Curación para McKenna). Allí recibieron muchas palabras de apoyo de amigos, familia e incluso de personas que no conocían.

"No me gusta que me estén reventando el teléfono, pero abrir Facebook y recibir una nueva notificación de esperanza y de oración cada segundo es muy alentador", comentó Lee.

A Kassy también le pareció alentador y dijo: "Nunca creí verdaderamente en el poder de la oración, pero luego de publicar la situación de McKenna, ¡en 20 minutos ya habíamos empezado a tener buenas noticias! Estamos bendecidos por todos y por todo lo que están haciendo por nosotros".

Luego de un mes de estadía en el hospital, Lee y Kassy pudieron tomar finalmente su pequeño capullo de felicidad y llevarlo casa. Los médicos informaron a los padres que todavía podría haber algo de daño cerebral que aún podía afectar la visión y las habilidades motoras de su hija. Sin embargo, los médicos hicieron énfasis en los fuerte que son los niños pequeños y que McKenna tiene todas las posibilidades de una recuperación total.

Aliviados por irse a casa con su bebé de tres meses de edad, Lee y Kassy agradecieron desde su corazón a todos los que los apoyaron vía online.

Estos padres se han comprometido a mantener informados a todos con respecto al progreso de McKenna y se tomaron el tiempo para advertir a otros de que estos accidentes pueden ocurrirle a cualquiera en cualquier momento.

Con mucha emoción, Kassy les recordó a sus guerreros online de la oración "darles a sus bebés un beso y un abrazo extra esta noche. NUNCA sabes si tu vida dará un vuelvo en un abrir y cerrar de ojos".

Muestra esta inspiradora historia de fe y oración a tu familia y seres queridos en apoyo a la pequeña McKenna y sus hermosos y amorosos padres.