Chica saca a pasear a dos perros al parque y ve a un hombre de blanco salir de un coche; ya sabe que es su dueño

Abr 04, 2019

Los veteranos se han enfrentado a más cosas que la mayoría de nosotros y volver a casa después de cumplir con su deber puede ser una gran lucha. El TEPT es más común de lo que debiera, y no es un diagnóstico fácil para nadie.

Muchos veteranos dependen de sus animales para poder volver a sentirse normales de nuevo. Los perros pueden ser fantásticos como apoyo emocional.

Joshua, un veterano de la Fuerza Aérea, era y se encontraba como la mayoría después de regresar del servicio activo en Afganistán.

Le resultaba muy difícil volver a adaptarse a la vida civil normal y corriente.

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Las pesadillas lo acosaban a diario. Buscaba el aislamiento como solución y también sufría de otros síntomas del TEPT.

Admite que te sientes completamente aislado al volver a tu vida de civil, después de haber estado en una zona de guerra activa. Afirma que te sientes solo y aislado del mundo.

Su único consuelo eran sus perros. Sus dos perros, Momma y Panda, son los compañeros que le proporcionan el apoyo constante que desea y necesita antes que cualquier otra cosa.

Joshua se encontró con un problema cuando tomó una decisión. Pensó que un cambio sería muy beneficioso para él. Decidió mudarse de Luisiana a California.

Lo triste es que Momma y Panda no pudieron acompañarlo en el viaje. Joshua sabía que tendría que lidiar con una separación temporal y estaba de acuerdo con eso, no obstante le dolía aunque fuera por un corto período de tiempo.

Recuerda que despertarse sin ellos acurrucados bajo sus mantas y a su lado era una sensación bastante extraña. Y realmente echaba de menos sacarlos a pasear todos los días.

Finalmente, después de dos meses, llegó el momento de que los tres se reunieran. Aunque ya era hora de que Momma y Panda se instalaran en su nuevo hogar, Joshua no podía llevárselos consigo sin ayuda.

Aquí es cuando el programa de televisión, Pit Bulls & Parolees, decidió ayudar. Ellos lograron hacer exactamente lo que Joshua necesitaba.

Mariah escuchó la historia de Joshua y lo que necesitaba. No se lo pensó dos veces y se ofreció a llevar a sus perros a casa.

Joshua pudo expresar lo mucho que extrañaba a sus dos cachorros con palabras, pero estos no podían hacer lo mismo.

Aunque los perros no pueden hablar, pueden comunicar que algo va mal. Habían comido muy poco en los dos meses que estuvieron separados de Joshua y habían perdido mucho peso.

Mariah se preparó para reunirse con Joshua en un parque cercano a su casa.

Cuando los perros vieron a Joshua, se olvidaron por completo de lo infelices que habían sido.

Ahora son, de nuevo, una familia feliz de tres miembros y, por fin, están felices en su nuevo hogar. Todo esto gracias a Mariah.

¡Qué historia tan conmovedora!

El compañerismo es el mejor regalo que la vida nos puede dar. ¿Dónde estaríamos sin nuestros perritos y sin esos veteranos de guerra que tanto han hacen por un país? ¿Conoces alguna historia similar sobre algún veterano? Por favor, cuéntanosla en la sección de comentarios que aparece a continuación.