Bullmastiff familiar se convierte en el protector del nuevo bebé y lo calma cuando llora
Ene 16, 2020
Cualquier nuevo miembro que entre en la familia, sea humano o peludo, puede suponer un poco de estrés y de preocupación, ya que ahora todos se están acostumbrando los unos a los otros. Una familia de tres miembros del norte de California compartió su historia de cuando pasaron a convertirse en una familia de cuatro miembros. Trajeron a su bebé a casa y, tal como esperaban, la mascota de la familia y el nuevo bebé se hicieron rápidamente amigos, y ninguno de los dos se aparta del lado del otro ni por un solo momento.
Los Michalek dieron recientemente la bienvenida a su familia a un nuevo bebé, y se apresuraron a presentarle a Brutus, su bullmastiff. Ninguno estaba preocupado por la forma en que Brutus reaccionaría ante el nuevo miembro porque, como le dijeron a The Dodo, ya tenía mucha experiencia con niños y disfrutaba de su compañía, y a menudo se ponía muy contento cuando oía el ruido de niños afuera.
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Al traer al nuevo bebé a casa, los padres le dieron al bebé y a Brutus la oportunidad de conocerse, y se puede decir que Brutus se enamoró inmediatamente. Desde ese día, Brutus ha mantenido siempre un ojo vigilante sobre el bebé, incluso respondiendo a sus llantos y llamadas de atención con suma preocupación. Cuando el bebé Kayden lloraba, Brutus corría a ofrecerle un juguete para que jugara, o se sentaba cerca de él para consolarle y calmarle, dijo Michalek a The Dodo.
A medida que Kayden ha ido creciendo, la pareja se ha convertido en inseparable y se les puede ver siempre al uno al lado del otro, a menudo metiéndose en problemas y divirtiéndose juntos. Brutus se ha convertido en una especie de niñera para Kayden, siempre cuidando y protegiendo a su hermano pequeño y dando a sus padres un descanso de tener que entretener a Kayden las 24 horas del día.
La mayoría de los dueños de perros son conscientes de que sus mascotas son extremadamente susceptibles a los estados de ánimo emocionales y a los cambios de comportamiento porque sus perros suelen ser los primeros en proporcionarles consuelo durante momentos de estrés. Brutus pudo hacerlo desde el principio de la llegada de Kayden en este mundo, y se dedicó a consolar a Kayden desde el instante en el que este entró a formar parte de su vida.
Para esta familia, tanto el bebé como el perro tendrán siempre a un mejor amigo en el otro, asegurándose de que ninguno se vaya a aburrir o sentir solo. Y el pequeño Kayden tiene suerte de crecer con un amigo perro tan cariñoso a su lado.