Adolescentes se encuentran con un accidente donde muere una madre, escuchan llantos dentro y saben que su bebé está viva

Feb 20, 2019

Dos adolescentes salvaron la vida de una pequeña bebé luego de un devastador accidente automovilístico.

Hunter Hasenjaeger, de 16 años, y Collin Barry, de 17, estaban de camino a casa un poco después de la medianoche el 30 de junio del 2017. Se estacionaron cuando observaron varios vehículos estrellados en medio de un montón de humo. Otra pareja de peatones ya había llegado a la escena y desesperadamente les dijeron a los chicos: "¡Hay un bebé en el auto!".

Los adolescentes sacaron sus teléfonos inteligentes y encendieron sus linternas. El panorama era terrorífico: una embarazada de 27 años estaba apenas viva en el asiento del conductor y una bebé estaba atrapada en su silla llorando.

Los chicos entraron en acción. Hasenjaeger sostuvo la linterna con firmeza mientras que Barry fue hasta el asiento trasero y desamarró a la bebé. En todo momento Hasenjaeger intentaba consolar a la mamá.

"No paraba de decirle a la mamá que la ayuda estaba en camino y que su bebé estaba bien", explicó. Los otros peatones ya habían llamado a la policía, por eso Hasenjaeger se quedó junto a la madre durante lo que resultarían ser sus últimos momentos. Aunque sobrevivió lo suficiente como para que llegaran los paramédicos y la transportaran al hospital, murió por sus heridas un día después. Su hijo por nacer también falleció.

El lado bueno de esta terrible tragedia fue que su bebé de un año de edad salió ilesa. La entregaron a su abuela luego de que los médicos la examinaran.

En cuanto a Hasenjaeger, dijo que el incidente lo dejó temblando y llorando. Nunca se hubiera esperado tener que lidiar con algo como eso, en especial a la corta edad de los 16 años. Se consuela con el hecho de que la bebé sobreviviera. Incluso la visitó en su casa.

"Le llevé comida a la familia [de la víctima] y le regalé un oso de peluche a la bebé", dijo. "Hacer eso me ayudó a lidiar con lo que pasó".

El conductor responsable del accidente, un joven de 23 años llamado Jacob Kaminski, fue arrestado con una serie de cargos. En un principio lo llamaron a la corte por conducir en estado de ebriedad, posesión de marihuana, parafernalia de drogas, incumplimiento en reducir la velocidad para evitar un accidente y operar un vehículo sin seguro. Eventualmente recibió el agravante de manejar bajo los efectos del alcohol y el imprudente homicidio de un niño en gestación. La familia de la víctima estaba presente en la audiencia de fianza.

¿Qué piensas sobre esta historia? ¿Qué habrías hecho tú si te hubieras tropezado con la escena de un accidente como estos dos adolescentes? Cuéntanos en la sección de comentarios y no dudes en compartir esto con tus amigos y seres queridos para que se conozca el acto heróico de Collin y Hunter.